Indigencia aumenta en fin de año y genera dos riesgos sanitarios
La indigencia vuelve a emerger en esta época del año, a pesar de la pandemia. Las calles cochabambinas están tomadas por personas procedentes de campo a las que no les importa exponer sus vidas por un poco de limosnas.
El director del Consultorio Médico de Emergencia de Cochabamba, Israel Pinaya, indicó que la presencia de este segmento conlleva un doble riesgo para la sociedad. Es decir, no solo ellos pueden enfermar, sino que, además, son potenciales diseminadores de males.
Pinaya explicó que los indigentes, al estar a la intemperie, soportan temperaturas extremas que los exponen, principalmente, a enfermedades respiratorias. Los niños pueden contraer resfríos comunes y los adultos –especialmente los de la tercera edad- neumonías y bronquitis.
Además, los grandes y pequeños que están en situación de calle son vulnerables al coronavirus, considerando que la mayoría, quizá por desconocimiento, no cumple las medidas de bioseguridad.
CONTAGIOS
Por otro lado, Pinaya dijo que los indigentes pueden ser un foco de transmisión del COVID-19 para el resto de la sociedad cochabambina, considerando que su salud no es controlada regularmente.
Alertó que algunas personas que están en las calles, al ser de la tercera edad, tienen enfermedades de base y contagiarse para ellos sería letal.
SITUACIÓN
Durante un recorrido por calles céntricas de Cochabamba, OPINIÓN constató que muchos indigentes no portan barbijos ni alcohol y los que sí tienen estos elementos de bioseguridad, no los usan correctamente.
Muchos reposan en el asfalto frío, aguardando la caridad de las personas.
Pinaya sugirió que las autoridades sanitarias les doten insumos de bioseguridad o se los traslade a refugios.