Opinión Bolivia

  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
  • Actualizado 17:03

Huyeron de la violencia para ser maestras de la comida vegana

Al menos 15 mujeres que fueron víctimas de sus parejas aprendieron a cocinar de la mano de expertos de Italia e, incluso, Paquistán. Ahora tienen un negocio gastronómico.
Una de las mujeres que sufrió violencia cocina  en las instalaciones de Adelante Mujer.  DICO SOLÍS
Una de las mujeres que sufrió violencia cocina en las instalaciones de Adelante Mujer. DICO SOLÍS
Huyeron de la violencia para ser maestras de la comida vegana

Son un ejemplo de vida. 15 mujeres violentadas por sus parejas calmaron su sufrimiento a través del arte culinario. Hoy son maestras de la comida vegana de Cochabamba.

Todas recibieron maltrato físico y psicológico de parte de sus parejas. En la pandemia, la violencia fue llevada al extremo: las pequeñas habitaciones en las que moraban se convirtieron en infiernos grandes y huyeron, escaparon a costa de contagiarse. Algunas solas, otras con hijos o, en el peor de los casos, embarazadas.

Se agruparon en Adelante Mujer, un espacio que no solo las resguardó de la violencia, sino que las empoderó a través de nuevos oficios.

La mentora del proyecto, Sarah Abdoo, contó que, entre otras cosas, las mujeres aprendieron cocina de la mano de expertos nacionales e internacionales.

Hubo un italiano que les enseñó cómo preparar pastas; también un paquistaní, con el que aprendieron sobre comida hindú.

El tiempo transcurrió y no solo sanó sus heridas, también les permitió acumular los suficientes conocimientos para gestar un proyecto gastronómico que hoy es un referente de la comida vegana en Cochabamba.

El menú que alistan los lunes, miércoles y viernes para sus comensales es un lienzo en blanco en el que se explayan, en el que liberan sus saberes y los conjugan con los nuevos conocimientos adquiridos; es una terapia cuyo resultado es un deleite para el paladar.

En línea con el veganismo -que evita usar productos de origen animal- innovaron el ámbito culinario qhochala con anticuchos de hongos, que sirven todos los viernes por las noches; o su “pinky pie”, que es una tarta elaborada con masa integral y rellena con guayaba.

El viernes, por ejemplo, el menú para el almuerzo era un “Warmiwich”, una invención que consistía en un sándwich de pan casero de tomate y romero, acompañado de guacamole, huevo de tofu, veganesa de albahaca, berenjena asada, zucchini y hongos. Además, llevaba chips de remolacha y papas al horno.

Esa delicia venía acompañada de un postre. Todo el “completo” es comercializado a 20 bolivianos.

DETALLES

Las mujeres entre 17 y 37 años de edad sostienen el proyecto con la venta de sus productos.

En promedio, cada jornada, acomodan hasta 30 “completos”, más o menos.

El menú es compartido en su página oficial de Facebook, cuyo nombre es Adelante Mujer. Además, en ese espacio tienen links para unirse a grupos de WhatsApp donde se reciben las órdenes y se envían pedidos a domicilio.

El objetivo es consolidar un restaurante y, para ello, las mujeres tienen muchas necesidades, desde manteles para recibir a los comensales, hasta computadoras en las que puedan guardar las recetas veganas que innovan constantemente.

Para ayudar a las mujeres, el número de referencia es el 62653164.

2A F2-SOLIS-MUJERES2A F3-SOLIS-MUJERES