Opinión Bolivia

  • Diario Digital | sábado, 20 de abril de 2024
  • Actualizado 07:25

Una familia recorre la ciudad con su "autito" en busca de alimentos para donar

Rodrigo Chávez Miranda, a bordo del Toyota con el que su familia recorre la ciudad con una consigna altruista. Gentileza familia Chávez Miranda.
Rodrigo Chávez Miranda, a bordo del Toyota con el que su familia recorre la ciudad con una consigna altruista. Gentileza familia Chávez Miranda.
Una familia recorre la ciudad con su "autito" en busca de alimentos para donar

“Necesitamos apoyo de las empresas. Requerimos huevos, algo de fideo y arroz para ir armando las canastas solidarias, de modo que podamos repartirlas directamente con los pollos que nos donarán el miércoles. Quisiéramos que nos puedan colaborar en esta cruzada, que se llama Donemos amor con Ñeque".

Ese es el llamado de Rodrigo Chávez, quien junto con su hermano Rafael y sus padres Rossemary Miranda y Juan Chávez Mendieta comenzaron una campaña, hace aproximadamente tres semanas, que tiene como objetivo alimentar a las familias con menos recursos de Tiquipaya, municipio al que tienen cariño desde que los recibió en 1996.

La iniciativa, llamada Donemos amor con Ñeque, creció de manera sorpresiva. Rodrigo contó que todo comenzó con un gesto desprendido de sus papás, quienes consiguieron un monto de dinero con el que compraron algunos alimentos para los vecinos de la comunidad. Un día, Rodrigo se dirigió al mercado de la zona y se encontró con un amigo de la Avícola Rolón, a quien le comentó sobre la idea.

“Me dijo ‘dame tu número’ y luego me llamó para contarme que me donaría 1.200 huevos. Después me pasó el contacto de una señora llamada Gladys, quien tenía una distribuidora de pollos. Ella me pidió que fuera a recoger 150 unidades. Así logramos entregar casi 350 canastas a familias del distrito 6 y 5, y algunas del 4, en Tiquipaya. La iniciativa nació con el apoyo de mis papás. Hemos tenido que buscar permiso para circular. Al auto de mi hermano lo matoneamos”, describió Rodrigo. 

Él le imprimió su identidad a la cruzada que funciona “sobre ruedas”, pues un auto Toyota aguanta los viajes y las cargas. Todo sea por seguir con la acción altruista, apunta.

La familia Chávez Miranda consiguió la colaboración directa de firmas como Delizia (3 mi jugos pequeños y 60 litros de yogur), Copelme (2 mil unidades de papel higiénico), la Asociación de Porcinocultores de Cochabamba (30 kilogramos de embutidos) e Imba (dará 200 pollos), algunas de las compañías que se sumaron a la premisa.

Y las llamadas no paran. Las personas que se enteran de que la familia destina alimentos a la población de Tiquipaya suelen comunicarse con Rodrigo, alertando sobre necesidades propias o de otros. “Hoy continuamos en la campaña porque la situación es complicada. Señores me localizan por medio de la página y cuentan que no tienen nada para comer”, dice. 

“La ayuda se ha centrado en el Banco de Alimentos. Necesitamos apoyo de las empresas. Requerimos huevos, algo de fideo y arroz para ir armando las canastas solidarias”, pidió Rodrigo, quien además se desempeña como director de Relaciones Públicas y Comunicación de la Cámara Junior Internacional (JCI) de Cochabamba.

Su familia se encuentra agradecida con el municipio. Llegó en 1996 y, en ese momento, comenzó la historia. Rossemary, quien es psicóloga, y Juan, pedagodo, fundaron la escuelita La Floresta y desarrollaron una serie de acciones que responden al compromiso social.

Las empresas que deseen cooperar con la causa, pueden contactar a Rodrigo mediante el teléfono 72787017.