Lo íntimo y privado se convierte en prohibido.

El antropólogo José Antonio Rocha y la psicóloga Ruth Vargas sostienen que lo referido a la sexualidad y el embarazo adolescente es un tema íntimo, privado y familiar que se debe tratar en torno a lo cotidiano de la vida de cada persona, en este caso de los adolescentes de área indígena originaria campesinas.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define como adolescencia al “período de la vida en el cual el individuo adquiere la capacidad reproductiva, transita los patrones psicológicos de la niñez a la adultez y consolida la independencia socio económica” y fija sus límites entre los 10 y 19 años de edad. Las definiciones de “adolescencia” y “estado adulto” varían de una cultura a otra.

Vargas explica que dentro de la Psicología, la sexualidad humana abarca lo referido a las relaciones sexuales, “lo que conocemos como el coito, el erotismo , la intimidad y el placer que es experimentado y expresado”.

LOS PUEBLOS Respecto a los yuquis y la “entrega” de adolescentes a quienes serán sus esposos, Rocha agrega que también existen otros pueblos donde “todavía son los papás quienes arreglan las relaciones matrimoniales” y relaciona este aspecto con lo cultural.

En pueblos como el quechua Raqaypampa o el Yuracaré, el tema es diferente y se da también en provincias como Arani, Punata u otras.

“Este tema de la sexualidad es íntimo, privado y por eso se lo sigue manteniendo como si fuera un tabú. Es una cuestión más de contexto privado para los indígenas o en la misma ciudad”.

Las conversaciones son más sencillas cuando se dan entre personas de la misma edad.

“Hay que conocer en qué lugares o en qué momentos se habla. Seguramente son momentos de mucha intimidad y familiaridad. No se habla tan abiertamente”.

Acota que las autoridades indígenas no deben ver esto como un tema externo y deben tratarlo en aspectos cotidianos de los adolescente de su comunidad, incluyendo el tema de la sexualidad entre otros, como la preparación de los adolescentes para ser padres o asumir responsabilidades de familia, entre otros, como ya se trata entre los guaraníes, donde los familiares acompañan el proceso.

Por otro lado, el antropólogo reconoce que en los pueblos “saben cómo conducir estos temas”, porque embarazos siempre hubo.

“Por ejemplo, en el Valle Alto, cuando una mujer se embaraza y eso no concluye en un matrimonio, quien se hace cargo de la wawa es la familia de la mujer y lo asumen como algo que es su tarea. Las mismas sociedades tienen mecanismos encarar la sexualidad y los embarazos”.

Para la psicóloga, “la sexualidad es una declaración práctica de vida entre una mujer y un varón” y se debe manejar con delicadeza.

“Las equivocaciones pueden repercutir negativamente en los adolescentes que están marcando su destino. Creo que debe realizarse un trabajo de prevención y personalizado. En nuestro medio actual, ya no deberíamos de tomarlo como un tabú. Hay formas de trabajar con esta población, y lo más aconsejable es hacerlo de manera separada en de las unidades educativas”.

Al respecto, Rocha enfatiza el hecho de que los embarazos en adolescentes siempre existieron, pero que “ahora, la gente se preocupa más y es más público”. “Nosotros mismos lo convertimos en un tema tabú porque no sabemos cómo encarar y en qué momento hablar”.

Considera que entre los adolescentes y jóvenes de pueblos como Raqaypampa, “donde la vida sexual es más dinámica”, seguramente las charlas en torno a la sexualidad se realizan sin tapujos, pero aquello no ocurre con sus mayores.

“A mí me parece productivo no hablar solo de la sexualidad, sino de otros temas también”.

CHISTES Y CUENTOS Una forma de conocer las percepciones en torno a la sexualidad, según Rocha, son los cuentos y los chistes que se comparten en las comunidades.

“Por lo general, se habla por esta vía indirecta, porque se trata de algo que humanamente no es para contar a medio mundo”.

Indirectamente

En los pueblos indígenas, los cuentos y los chistes son una forma indirecta de referirse a los temas referidos a la sexualidad y la reproducción.

Aspectos a considerar en torno al tema

Área rural: Según un informe de febrero de 2018 del Instituto Nacional de Estadística (INE), de las mujeres entrevistadas de 20 a 24 años en el área rural, un 55 por ciento dio a luz antes de los 20 años, en comparación con el área urbana que llegó a 28.1 por ciento .

Educación: El porcentaje de adolescentes que estuvieron embarazadas alguna vez y que tiene educación primaria (42,5 por ciento ), es seis veces más alto al de las mujeres con educación superior (6,8 por ciento ).

Lugar de residencia: La región de los llanos tiene mayor porcentaje de adolescentes madres con 14.5 por ciento , seguido de los valles con 11.1 por ciento y altiplano con 9.9 por ciento .

La región en el mundo: Según un informe publicado a fines de febrero de 2018 por la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS), Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), América Latina y el Caribe continúan siendo las subregiones con la segunda tasa más alta en el mundo de embarazos adolescentes. En la región, el15 por ciento de los embarazos ocurren en menores de 20 años.

Mortalidad materna: El mismo informe expone que la mortalidad materna es una de las principales causas de muerte en las adolescentes y jóvenes de 15 a 24 años en la región de las Américas. En 2014, fallecieron cerca de 1.900 adolescentes y jóvenes como resultado de problemas de salud durante el embarazo, el parto y el posparto. A nivel global, el riesgo de muerte materna se duplica en madres más jóvenes de 15 años en países de ingreso bajo y mediano.

Abandono de estudios: Según la Unicef, “muchas niñas y adolescentes tienen que abandonar la escuela debido a un embarazo, lo que tiene un impacto a largo plazo en las oportunidades de completar su educación e incorporarse en el mercado laboral, así como participar en la vida pública y política”.

Sin planificación: Un estudio de salud sexual y reproductiva y VIH de los jóvenes y adolescentes indígenas en Bolivia, Ecuador, Guatemala, Nicaragua y Perú de la OPS estableció que 4 de 5 embarazos en adolescentes y jóvenes, de entre 15 y 19 años, no son planificados, y la mayor cantidad se produce en un contexto de pobreza, por lo que Bolivia identificó este hecho como un problema de salud pública.

En Bolivia: Según datos oficiales de la OPS/OMS, en Bolivia las tasas de embarazo se encuentran entre el 12 y 18 por ciento , dependiendo de las regiones.

El robo: El estudio de salud sexual y reproductiva incluye que los varones en Bolivia manifestaron desarrollar una práctica que contiene rasgos de violencia, como “el robo”.