Las empresas instaladoras de gas de Bolivia rompieron hoy el diálogo con el Gobierno e ingresaron en una huelga de hambre a nivel nacional debido a que no se llegó a una solución para la mejora de la escala de costos. 

“Nos declaramos en huelga de hambre e instruimos a todo el país que en cada distrital debe replicarse los piquetes de huelga, en los diferentes departamentos a partir del día de mañana”, afirmó el presidente de la Asociación de Empresas Instaladoras de Gas de Cochabamba (Aceigas), Jhonny Peredo.

Desde la semana pasada, se instaló en el departamento una mesa de trabajo entre las seis empresas instaladoras de gas de Bolivia con representantes de la Gerencia Nacional de Yacimientos Petrolíferos Bolivianos (YPFB) respecto a una nueva escala de costos.

Sin embargo, no se llegó a ningún acuerdo porque las empresas instaladoras de gas observaron la “poco realista” propuesta que hacía YPFB para el incremento en el precio de los materiales y mano de obra en la actividad que realizan. 

Otro problema es que no existe una solución al problema de dotación de material para las instalaciones de gas subvencionadas, que a nivel nacional suman 90.000 de las que 23.000 están previstas para Cochabamba.