Padres de familia denuncian que, en medio de la cuarentena por el coronavirus, colegios privados cobran pensiones con multas, aplican incrementos, exigen el pago disponiendo buses para recoger el dinero o piden registrarse por WhatsApp para enviar personal a cobrar casa por casa. Los padres piden sanciones y además rebaja de 50% en las pensiones. El titular de la Dirección Departamental de Educación (DDE), Félix Zapata, pidió denunciar llamando a los teléfonos 607-68599 y779-96215. En tanto que el presidente de la Asociación de Colegios Particulares (Andecop), Genaro Durán, dijo desconocer esos extremos y rechazó el descuento requerido porque deben cumplir con los sueldos de los maestros.

JBC denunció que el colegio de sus hijos cobró pensiones con multas por mora e incluyeron un incremento sin que haya habido aumento salarial. “Tuve que pagar, asustado por la multa”.

Más padres tienen denuncias similares. G.G. dijo que el colegio de sus hijos les exige el pago y dispuso de buses para ir a cobrar. Otro establecimiento subió la pensión en 12 bolivianos y cobra multa por no haber pagado la pensión antes del 10 de abril. M.W. difundió la foto de una boleta donde el colegio pide a los padres usar el servicio de banca por internet para pagar y a quienes no son clientes de su banco, pasar por agencias. M.C., estudiante de secundaria, aseguró que en su colegio subieron la pensión en 10% para inscribirlos en enero y, pese a las denuncias hechas en su momento, la Dirección de Educación no respondió. 

OPINIÓN también recibió dos denuncias desde Santa Cruz de padres que se sumaron al grupo creado en Cochabamba porque en su ciudad no hallan eco y ambos reclaman contra un mismo colegio de esa ciudad ubicado en la carretera al Norte. Leonardo S. dijo que este establecimiento se niega a hacer descuentos y arguye que necesita el dinero para pagar sueldos, pero hace pocos días despidió a todos los profesores auxiliares para ahorrarse sus salarios y Oscar A. contó que los estudiantes pasan clases una o dos veces por semana por 49 minutos cada periodo, en primaria, y en kínder son dos periodos semanales de 20 minutos cada uno. “El trabajo los hacemos en casa, el colegio no les proporciona ninguna herramienta a los profesores. (…) Nos molesta que quieran pago del 100% por clases que no llegan al 20% de productividad y toda la responsabilidad queda para los padres”

CRÍTICAS A CLASES VIRTUALES Justamente la mala calidad de las clases a distancia es motivo de más quejas. M.C. contó que en su colegio les mandan tareas “sin explicaciones y piden el pago total de las pensiones”. A.M., madre de un niño de kínder, dijo que la profesora, en todo el tiempo de cuarentena, solo mandó dos videos de 15 y 12 minutos. “La pensión cuesta más de 700 bolivianos, pero yo hago el trabajo. Ella no interactúa ni pregunta por el avance, exige fotos o videos del trabajo de los niños para hacer su informe de su trabajo”. El Director de Educación recordó que las clases virtuales no están reguladas y no deben tomarse como avance curricular ni ser objeto de evaluación para dar puntaje.

Varios padres coincidieron en que si reclaman son maltratados y les piden retirar a sus hijos. Algunos expresaron su intención de pedir al Gobierno una norma para el traslado automático a colegios fiscales. Otros, sobre todo de inicial y primaria, evalúan no enviar al colegio a sus hijos durante el resto del año y otros varios plantean que se clausure el año.

En una carta abierta difundida por Twitter, el grupo de padres organizados cuestiona las exigencias de los colegios a pesar de que el Ministerio de Educación instruyó en marzo que se reprogramaran los pagos hasta fin de año. Piden, además del descuento, una mesa de diálogo y conciliación de partes. La diputada de Unidad Demócrata, Claudia Mallón, presentó un proyecto de ley planteando el 30% de descuento en el pago de pensiones mientras no haya clases presenciales. 

Durán dijo que si bien comprende las dificultades de los padres, también se debe tener en cuenta que los maestros también están en dificultades porque solo les pagaron sueldo parcial de marzo y desde entonces no recibieron ningún pago. Los colegios rechazan acogerse a los préstamos del Gobierno para pagar dos meses de planillas porque saben que después no podrán cumplir con los bancos.