Dirigentes de Control Social de Quillacollo tomaron hoy las instalaciones del Concejo Municipal, la tarde de este martes, exigiendo que el ente deliberante apruebe el Plan Operativo Anual (POA) 2021, mediante Ley Municipal, para su respectiva inscripción en Presupuesto General de la Nación previsto para el próximo año, por parte del Ministerio de Hacienda y Finanzas Públicas.

El presidente del Control Social, Richard Baptista, señaló que las oficinas del ente fiscalizador permanecerán cerradas hasta que los técnicos de esta instancia terminen su trabajo y el pleno del Concejo apruebe el POA 2021 de Quillacollo destinado a la continuidad de proyectos, salud y educación para el próximo año.

“Las puertas del Concejo van a permanecer cerradas hasta que se apruebe el POA 2021 y se enmiende este perjuicio a todo el pueblo de Quillacollo por parte de los concejales”, aseveró.

Por su parte, el dirigente del Distrito 3, Gilmar López, dijo que en caso de no viabilizar la aprobación del POA, desde mañana se asumirán nuevas medidas de presión como una huelga general indefinida, bloqueos y movilizaciones.

Al respecto, el alcalde, Héctor Montaño, calificó la no aprobación del POA como una “medida política” que solamente busca perjudicar a la ciudad de Quillacollo por intereses particulares de algunos concejales poniendo ponen en riesgo los recursos económicos que necesita Quillacollo.

“Se ha ido corrigiendo todo lo que han observado, observaciones de forma que solo perjudican al pueblo de Quillacollo”, enfatizó. En el POA se presupuestaron recursos que deben ser invertidos en salud, educación, desayuno escolar, seguridad ciudadana y proyectos que deben ser concluidos destinados al desarrollo y progreso de la ciudad