El descenso de casos COVID-19 en Cochabamba no dio un respiro al personal de salud, al contrario, lo puso en mayores dificultades.

La Federación Sindical de Trabajadores de Salud Pública de Cochabamba informó que, ahora que estamos en etapa de post confinamiento, la situación se dificultó más para el personal de salud del departamento.

Según la secretaria de Conflictos de ese gremio, Nelly Mayta, “no ha cambiado nada”, si bien disminuyó la afluencia de pacientes con coronavirus, hay otro grupo de enfermos con patologías diferentes que deben atender. Esto significa que la carga laboral no redujo.

A esto se suma que, la flexibilización de la cuarentena, los dejó sin servicio de transporte y comida.

Mayta contó que “las autoridades han dejado de asumir sus responsabilidades con lo que es la movilidad y la alimentación”. Es decir, el personal de salud tiene que comprar su comida cuando le toca hacer turnos prolongados y debe “arreglárselas” para llegar hasta su fuente laboral en fin de semana o turnos nocturnos, cuando hay mayor escasez de estos servicios.

CARGA LABORAL

El representante de la Federación, Adalid Gutiérrez, añadió que el trabajador continúa con recarga laboral. El estatuto de este sector señala que tienen que cumplir funciones 120 horas al mes, pero, en pandemia estuvieron entre 160 y 180 horas mensuales en los establecimientos de salud; mientras que los empleados ministeriales llegaron a prestar servicios hasta 200 horas.

“Realmente han estado haciendo turnos tras turnos y, a veces en la pandemia, no tenían ni un refrigerio”.

PEDIDO

La Federación está solicitando que la carga laboral reduzca a seis horas, como establece el estatuto y, si se da un rebrote y es necesario, aseguraron que redoblarán esfuerzos.

Mayta acotó que aún hay falencia en la contratación de personal, tampoco recibieron un incremento salarial o bonos.

En lo que va de la pandemia, en Cochabamba más de 16 personas que trabajaban en establecimientos de salud fallecieron víctimas del COVID-19.

Datos
Las situaciones negativas a las que se enfrenta el personal de salud en pandemia son varias: 

1. Preocupación
Mientras muchas personas acuden reclamando atención, el personal sanitario también enferma o ve a sus personas cercanas enfermar.
 
2. Dilemas
La sobrecarga y la evolución incierta de los pacientes hacen que, en ocasiones, el profesional se vea obligado a tomar decisiones complejas, en un breve tiempo, generando intensos dilemas morales y de culpa. 

3. Enfermedad
El personal de salud tiene un mayor riesgo de contraer enfermedades y transmitirlas a sus familiares, amigos y otras personas en el trabajo.

4. Dar apoyo
Conforme aumenta la demanda y la asistencia, la angustia del paciente y las familias puede ser cada vez más difícil de manejar para el personal sanitario.

5. Estrés
Ayudar a quienes lo necesitan puede ser gratificante, pero también difícil, ya que los trabajadores pueden experimentar miedo, pena, frustración, culpa, insomnio y agotamiento.