Cristian tiene solo 16 años, pero el afán de cuidar la naturaleza y servir a la sociedad es igual al de su hermano mayor, Ernesto, a quien familiares y amigos recuerdan con cariño y nostalgia a un año de su muerte.

El hermano menor de Ernesto Nina Mamani, bombero voluntario que murió en los incendios del parque Tunari en 2019, también se sumó a las filas del Grupo Especial de Operaciones de Salvamento (GEOS).

"Estoy postulando para el grupo GEOS desde octubre o noviembre del año pasado, siguiendo el ejemplo de mi hermano (...) Él me alentó con la naturaleza y me motivó a entrar a los scouts", indicó tras la misa que se realizó en la Catedral Metropolitana de Cochabamba para conmemorar un año de la muerte de Ernesto.

Es uno de los más jóvenes entre todos los guardianes que forman parte del grupo GEOS y que, notablemente, cuidan y rodean con mucho cariño. Aún estudia en el colegio y cursa el quinto grado de secundaria.

Aún con mucha pena por la muerte de Ernesto, la madre de Cristian, Rossmery, compromete todo su apoyo a su hijo menor, a quien admira por llevar tanto empeño y voluntad por servir y proteger la naturaleza.

"Aunque a mí me daba miedo, pero igual yo le tengo que apoyar, soy su madre. Ahora mi segundo hijito es bombero, está en etapa de preparación. Yo he educado así a mis hijos, con esos sentimientos, tengo que apoyar porque soy su madre", indicó Rosmery con nostalgia.

Participaron de la misa en la Catedral Metropolitana familiares, amigos y camaradas de Ernesto, quienes además compartieron palabras de aliento con sus padres y su hermano Cristian.

El presidente de la Federación de Empresarios Privados de Cochabamba (FEPC), Javier Bellott, presente en el acto religioso, demandó mayor atención de las autoridades en cuanto a la designación de recursos para los grupos voluntarios, a tiempo de hacer énfasis en la prevención de incendios en los parques y bosques de la ciudad y del país en general.

Por otro lado, el representante de GEOS, Carlos Azcárraga, recordó la importante y arriesgada labor de los diferentes grupos de bomberos voluntarios que luchan en la sofocación de incendios, muchas veces empleando sus propios recursos para algunos elementos necesarios para ejecutar sus labores.

MUERTE DE ERNESTO
El 30 de octubre, tras más de seis horas de trabajo en medio de uno de los incendios más grandes en el parque Tunari, Ernesto tropezó y resbaló unos 180 metros de profundidad, en una zona boscosa, en el camino a Tirani.

En la búsqueda, su acompañante gritó, pero Ernesto no respondió a su llamado. Desesperada reportó el accidente debido a que no podía descender sola por la intensidad del humo y los fuertes vientos. Tras unas cuatro horas de búsqueda, cerca de las 22:30 horas, hallaron el cuerpo del joven entre unas rocas y las ramas de unos árboles que habían sido consumidos por el fuego.

La muerte de Ernesto fue comunicada a su madre cerca de las 02:00 de la madrugada, quien aquella noche esperaba a su hijo con la cena lista.