Cada promontorio de tierra es un espacio donde enterraron a una persona. Entre 2020 y 2021 se llenaron entre tres y cuatro filas de tumbas en el cementerio de K’ara K’ara; las fechas denotan muertes diarias desde el año pasado, época de pandemia. Algunos dolientes informaron que varios murieron con coronavirus COVID-19, y otros con “sospecha” de esta enfermedad.

Este uno de los siete cementerios, que no tienen documentos en norma para su funcionamiento, que existen a margen del cementerio público general de la ciudad de Cochabamba. Las autoridades municipales realizan inspecciones.

El cementerio de K’ara K’ara, en la zona sur, no tiene muro perimetral que corresponda a un límite visible del camposanto y las tumbas están a la vista de quien pasé por el lugar. Está situado casi al lado del centro de la salud de la zona, a un lado de su avenida principal, y es visible desde la carretera que conecta con el Valle Alto del departamento.

Existe una oficina de administración. En situaciones similares funcionan otros cementerios, que se reactivaron durante la época de la pandemia, debido a la suma de víctimas del virus.

El secretario de Gobernabilidad de la Alcaldía de Cochabamba, Gustavo Vargas, informó que investigaron la situación y hallaron que hay siete cementerios fuera de regla.

Detalló que solo el cementerio de Valle Hermoso, también en el sur, tiene documentación con trámites en marcha. “Queremos que todo esté regularizado, no sabemos de los derechos propietarios, no conocemos muchas cosas. Inclusive suponemos que también son asentamientos”.

Vargas manifestó que los otros solamente tienen un inicio de trámite y no cuentan con la licencia de funcionamiento, para lo cual es necesario contar también con otros documentos, incluida la ficha ambiental que debe otorgar la Gobernación departamental; y eso también requiere cumplir exigencias como certificados de uso de suelo, distancias y otros como el amurallamiento y el cumplimiento de protocolos.

“El señor Alcalde nos ha instruido que hagamos el relevamiento correspondiente, para que estos cementerios sean regularizados si es necesario o en su defecto sancionados y clausurados”, sostuvo el Secretario de Gobernabilidad.

La autoridad informó que las subalcaldías realizan la tarea de investigar el detalle del funcionamiento de los camposantos, como en Itocta y Alejo Clatayud.

“Estos cementerios datan de muchos años atrás. Entiendo que se han activado por el tema la COVID y la emergencia sanitaria, y han empezado a tener estos entierros clandestinos, una serie de aspectos que no corresponden”.

Dijo que el objetivo es regularizar la situación, pero considerando el cumplimiento de los requisitos. Expresó que se prevé concluir el relevamiento de datos hasta la próxima semana.

La tarde de este miércoles, los concejales realizaron una inspección al cementerio de Monte Rancho, también en el sur. Es un camposanto más pequeño, pero similar al de K’ara K’ara, y que tiene expuesto “propiedad privada”.

La concejala Daniela Cabrera expresó que “al parecer” no cumple con la normativa. Acudieron con técnicos para verificar la situación. De acuerdo con el informe de la Alcaldía, habría derecho propietario para un área verde. “Pero, no cuenta con matrícula en favor del Gobierno Autónomo Municipal de Cochabamba, pero ya hay obras que se han estado realizando, hay diferentes construcciones”.

Dijo que pedirán informes a la Alcaldía para conocer el detalle de la situación.