La demanda de retiro de árboles se incrementa en Cochabamba. Hasta 30 solicitudes llegan de manera diaria a la Dirección de Medio Ambiente de la Alcaldía.

El titular de esa dependencia municipal, Elvis Gutiérrez, informó que la mayoría de estas peticiones proviene del norte y centro del territorio.

El personal de la Alcaldía no da curso a estos requerimientos, sin antes realizar una verificación de las especies naturales.

Gracias a este procedimiento, los funcionarios identifican que algunos vecinos quieren deshacerse de árboles por causas que no son admisibles, por ejemplo, solo porque obstaculizan el ingreso de luz.

Gutiérrez remarcó que personal especializado es el que define qué tipo de trabajo se debe realizar con cada especie. La gente que poda, corta o tala sin autorización está sujeta a sanciones económicas.

SITUACIÓN

El arborista certificado por la Sociedad Internacional de Arboricultura (ISA, por sus siglas en inglés), Mario Jaldín, explicó que la gente hace más intervenciones en árboles durante esta temporada seca, debido a que imita un hábito que caracteriza a la fruticultura. Los que cultivan frutas “esperan la época seca en la que descansan los árboles y quedan sin hojas para realizar la poda formativa”.

No obstante, dijo que esta práctica no debería aplicarse con especies nativas u ornamentales, que son las que generalmente crecen en aceras o viviendas. “La mayoría del arbolado es de hoja perenne, siempre verde. Durante todo el año encontraremos ramas quebradas, secas, enfermas o ramas indeseadas”. Es decir, sugirió que el cuidado sea permanente.

SECTORES

La Dirección de Medio Ambiente reconoció que sí hay sectores, especialmente dentro del Casco Viejo, donde los árboles son un problema, porque sus raíces rompieron aceras o causaron otro tipo de daños.

El destino de esos árboles será definido a posterior, cuando concluya el plan de arborización que ejecuta en la actualidad la Municipalidad.

En una etapa inicial, plantaron casi medio millar de ejemplares a lo largo de la avenida Heroínas.