Con un penal que Guillermo Ochoa le atajó a Robert Lewandowski como la nota más sobresaliente del partido, México y Polonia empataron ayer (0-0) en el 974 Stadium de Doha, por el grupo C, y le dieron “vida” al seleccionado argentino, tras su inesperada caída (1-2) frente a Arabia Saudita.

Ambos equipos generaron peligro sobre las porterías rivales, pero ninguno pudo superar ni a Ochoa, ni al golero polaco Tomasz Szczęsny, lo que coadyuvó a que el cotejo terminara sin apertura del marcador.

El trámite del compromiso fue parejo y el cuadro europeo tuvo la oportunidad más clara, cuando, tras revisar el VAR, el árbitro australiano Chris Beath marcó el penal por jalón a Lewandowski. El delantero del Barcelona vio cómo Ochoa desviaba el disparo sobre su izquierda.

México exigió a Szczęsny cerca del final del primer acto y en la etapa complementaria, pero tampoco logró anotar el ansiado gol del triunfo para “aprovechar” el tropiezo argentino. Con este resultado, los saudíes quedaron ubicados como los líderes con tres puntos. Aztecas y polacos tienen un entero, cada uno. Argentina, nada.

En la jornada del sábado, Polonia medirá fuerzas con los árabes (9:00) y habrá un duelo trascendental entre los seleccionados de la Conmebol y Concacaf (15:00).