Así titula el autor indígena del sur de Chile la pintura lograda con tanta significación por un araucano de Puerto Montt perseguido injustamente por defender su derecho propietario contra las grandes empresas de su país privatizado. Tiene la sugestiva autoría de "Caupolicán" y devela claramente la intervención chileno-inglesa en el puño de una garra sangrienta sobre el Litoral encadenado apretando el candado peruano de 1829.

Sorprendente es el caso del joven chileno que se presentó en la TV para pedir nacionalidad boliviana (porque se avergüenza de la política hitleriana de su país natal).

Elocuente el del escritor investigador Cástulo Martínez de Arica que escribe varios libros sobre “El mar de Bolivia”, “El Silala”, perseguido por su fidelidad a los documentos, a la verdad y a la justicia, históricos.

Los seguidores de Allende- los del Neo-Humanismo-la izquierda ideológica, el Comité de Amistad Chileno-Boliviano-gran parte del pueblo profundo de Chile, apoyan la reivindicación centenaria: Mar para Bolivia.

Muy triste el cantar amenazante de los conscriptos de la marina chilena contra bolivianos, peruanos y argentinos a quienes se les inculca sentimientos asesinos en su tierna edad por jefes militares fascistas descendientes de aquel asesino coronel Pedro Lagos quien ordenó en el Campo de la Alianza: “¡Hoy no hay prisioneros! ¡Ejecútese el “Repase!” La orden fue cumplida inmediatamente. Todos los heridos y prisioneros fueron “repasados”.

Lastimosamente, allá domina aún el sistema que destruye el planeta, el neoliberalismo violento. Continúan los seguidores del Plan Cóndor, presentes Pinochet-Piñeira y los "momios" conservadores en el poder del país hermano que no acepta la idea de la reivindicación marítima de Bolivia ni los derechos pendientes de mar con soberanía. Tendrían que leer cien veces el libro de Edgar Oblitas Fernández “Historia Secreta de la Guerra del Pacífico”.(*)

Importa ser ecuánime y no devolver con odio nuestra ansiedad marítima generalizando la autoría del Zarpazo a todo el pueblo de Chile. Pero en cuanto se trate el tema ¡MAR para Bolivia con soberanía! debemos ser precisos. Toda Bolivia unida, sin odios ni confrontaciones internas, reaccionar con patriotismo unitario.

Salir por nuestros fueros generacionales con la frente alta, la voz viril y el corazón en las manos, para denunciar el "Zarpazo"… y convertirlo, después que se logre la alegría, en un “Abrazo” de amor cuando llegue la fraternidad del Canto General y la mejor expresión boliviana de acercamiento humanista.

Mientras se prepare el día de la primavera histórica, y esa región, el Litoral boliviano, Tal-Tal y Antofagasta de mis añoranzas donde inicié mi profesión de médico al servicio de los humildes, Calama, Tocopilla, Cobija, toda la Pampa Grande volverá a vibrar con la bandera de Recabarren chileno y también boliviano, identificados los ancestros comunes del antiguo Tiwanacu, marcharán en pos de la justicia social, la libertad del pensamiento, la dignidad humana, la fraternidad.

Mientras no llegue ese esperado día desde el fondo de nuestro destino americano, ésta fecha y todas las futuras evocaciones del 14 de febrero de 1879, recordaremos con sentimiento la usurpación del territorio de Bolivia, el zarpazo de una guerra de conquista sin declaración antelada, preparada veinte años previos en favor de intereses empresariales nefastos, de privados accionistas ingleses, chilenos dueños del poder político y la “Huanchaca”, ajenos todos al afecto que ardió en la Escuela de Santa María de Iquique entre obreros del salitre, chilenos, bolivianos, peruanos.

(*) Edgar Oblitas Fernández. HISTORIA SECRETA DE LA GUERRA DEL PACÍFICO. Editorial Los Amigos del Libro, 2001. Casilla 450 Cochabamba Bolivia.

Enclaustrada.

Bolivia sin mar

Bolivia secuestrada criminalmente de su Litoral, sellados sus pulmones al aire salino de su mar Pacífico, el océano que no fue más suyo por la violencia guerrera, la astucia diplomática y la traición de los parlamentarios bolivianos en 1904.

Bolivia “enclaustrada”, que soporta el cierre brutal del candado desde 1929 cuando Chile comprometió al Perú execrándolo también en la historia de las maldades americanas.



Desembarco

El desembarco chileno en Antofagasta efectuado el 14 de febrero de 1879, con nula resistencia, en el entonces puerto boliviano de Antofagasta, fue la primera acción militar de Chile en la Guerra del Pacífico. Con éste se dio inicio a las operaciones militares de dicha guerra que aún no estaba declarada por ninguno de los dos gobiernos.

Colombia

El día 16 de febrero, pasó por Antofagasta el vapor “Colombia” y ahí se embarcó rumbo a Arica el Prefecto del Departamento de Cobija, Severino Zapata.

El 26 de febrero llega la noticia a La Paz de la ocupación de Antofagasta mediante correo expreso desde Tacna.