Actualmente, la mayoría de los perros viven en hogares y no en medio de la naturaleza, como en la antigüedad, pero aun así el cambio de temporada suele afectarles.

Esta es la razón por la que los dueños deben tomar algunas previsones para que los peludos se mantengan sanos, cuando empiece a descender la temperatura.

Si bien los canes poseen una capa de grasa en la piel que les sirve de protector térmico, también el pelaje cumple su funsión.

Hay que mencionar que los canes suelen mudar de pelaje dos veces al año, en primavera y otoño, esto les sirve para preparar su cuerpo ante el descenso de temperatura.

Es por ello que cuando se habla de invierno y perros, se deben tomar en cuenta ciertas recomendaciones para que su mascota pase por esta época del año sano y sin molestias.



ALIMENTACIÓN Durante esta época los perros suelen incrementar su alimentación para tener más energía y repeler el frío.



AGUA Aunque parezca obvio, es necesario revisar a diario que el perro tenga agua fresca.

Hay que comprobar que el líquido no se hayan enfriado mucho y que esté limpia.



EXTREMEDIDAS Las almohadillas de las patas de los perros son órganos muy importantes. Los suelos fríos pueden producir grietas en ellas.

Hay que verificar este problema y ante su aparición visitar a su veterinario.

Durante esta época de otoño las caminatas deben ser más cortas. Mucho tiempo a la intemperie puede hacer que el perro se enfríe.



LUGAR PARA DORMIR Durante el invierno, los perros que duermen a la intemperie deben contar con un espacio especial. Este lugar debe estar protegido del viento, la lluvia o la nieve. También se puede utilizar cobijas para mantener el calor y controlar la humedad.

Pero a medida que se acerque el invierno y cuando la temperatura sea más extrema, es mejor que el perro duerma dentro de la casa. Así cuidará la salud de su mascota.