Allison Mack y Felicity Huffman se convirtieron en los rostros más conocidos de la televisión por su participación en las series “Smallville” y “Mujeres desesperadas”, respectivamente, pero sus estrellas comenzaron a apagarse tras conocerse de su participación en delitos de tráfico sexual y soborno.

Ambas se declararon culpables y hoy enfrentan penas de entre 15 y 20 años.

Mack tiene arresto domiciliario desde febrero de 2018. Su trabajo en la red era reclutar mujeres para después obligarlas, a través de chantajes, a mantener relaciones con Keith Raniere, líder de la secta de esclavas sexuales Nxivm.

“Sé que puedo ser y seré una mejor persona. Siento mucho el daño que he causado”, dijo.

Su sentencia se conocerá el 11 de septiembre. Por su parte, Huffman junto a otros 12 padres pudientes y un entrenador, se declararon culpables de utilizar sobornos y otras formas de fraude en el escándalo de admisiones de universidades de élite, dijeron fiscales federales en Boston (EEUU), según BBC.

La nominada al Oscar por “Transamérica” pagó 15.000 dólares a una organización con la intención de facilitar que su hija tuviera una mejor calificación en sus exámenes de ingreso.

“Estoy avergonzada del dolor que le he causado a mi hija, mi familia, mis amigos, mis colegas y la comunidad educativa. Quiero disculparme con ellos”.

La pena es de hasta 20 años de prisión, dependiendo del pago, reportó El País. La conspiración mafiosa se destapó en marzo.