La Policía de China recibió a principios de mes la llamada desde un bar de una persona que encontró una maleta sospechosa. En su interior había más de 300.000 dólares y más adelante se logró identificar al dueño que debía encontrarse en ese lugar con su exnovia. ¿Y el dinero? Era una “tasa de ruptura”, una nueva tendencia en la escena amorosa china, según BBCMundo.

Los chinos, en los últimos años, pagan o reciben una especie de compensación al final de una relación larga. La persona que deja a la otra es la que hace el desembolso. Algunos estiman de forma pragmática la suma que su pareja se gastó en ellos cuando salían juntos. Mientras que otros la calculan en base a qué tan grave será el daño emocional por la ruptura. Se cree que este fenómeno se debe al creciente consumismo.