Carla Ortiz volvió, después de un año a su país, donde tiene planes para quedarse, en 2018 para realizar diferentes trabajos.

La actriz y productora puso sus ojos en su tierra natal, Cochabamba.

Según explicó, en una entrevista con OPINIÓN, tiene pendiente la filmación de la película Juana Azurduy y la elaboración de un documental para entender cuál es la verdadera realidad de las personas en el área rural.

“Con la película estaré unos tres a cuatro meses, pero también me encantaría poder entender lo que está pasando en mi país. Va siendo tiempo de que todos nos movamos más adelante de nuestras limitaciones”, aseguró.

Dijo también que para esto lo primordial será interiorizarse del conflicto político y social que existe.

“He trabajado en el altiplano con la gente que no tiene acceso al agua y gente de la cárcel. Me encantaría poder revisar un poco más, si es posible, con el gobierno de Cochabamba entender cuál es nuestra verdadera realidad en el área rural sobre todo”, acotó.

Ortiz se encuentra a punto de concluir su documental sobre Siria y comenzó con las filmaciones en Corea del Norte para mostrar el conflicto humanitario. Para noviembre tiene previsto ir a Yemen y continuar con este trabajo de recoger testimonios.

Llegó a Cochabamba, invitada por la Cámara de Industria, para ser la imagen de la marca Llajtamoda (ver página 4), algo que le llenó de mucho orgullo, por lo que destacó las ideas brillantes que se tienen para mostrar lo que hacen las manos bolivianas y cochabambinas.