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  • Diario Digital | miércoles, 24 de abril de 2024
  • Actualizado 16:48

DESEQUILIBRIO DE ESTRÓGENOS

Garbanzo para la menopausia

Garbanzo para la menopausia



Alteración hormonal

MARTÍN BRUNO, VIX.COM Y ABC.ES



El desequilibrio hormonal conlleva una serie de riesgos que pueden afectar gravemente nuestra salud (como causar varias clases de cánceres) y si bien estos desequilibrios se presentan en ambos sexos, las fluctuaciones en los niveles del estrógeno y progesterona son más comunes e intensas en las mujeres, especialmente durante el período de la menopausia (entre los 35 y 50 años).

La alteración de los niveles de estrógeno, denominada dominación del estrógeno, puede deberse a múltiples causas así como constituir un síntoma de varias enfermedades, por lo que controlar esta hormona es de vital importancia para mantener un buen estado de salud.

En este sentido, se han identificado varios alimentos, es-pecialmente las legumbres, capaces de controlar esta alteración hormonal, siendo uno de ellos el garbanzo, el cual, debido a sus compuestos fitoestrogenos, funciona como un buen sustituto y nivelador del estrógeno.

LA DOMINANCIA DEL ESTRÓGENO

Esta alteración hormonal se produce cuando se rompe la proporción entre progesterona y estrógeno. Naturalmente, la primera reduce su nivel a medida que la mujer va alcanzando su madurez, momento en el cual el estrógeno es la hormona dominante, pero este estado puede verse alterado por la influencia del estrés excesivo, las enfermedades hepáticas, las inmunodeficiencias o el efecto de algunas fuentes alimenticias y ambientales.

Algunos síntomas típicos de esta alteración hormonal pueden ser el aumento de las mamas y disminución de la libido, depresión, cansancio, dolores de cabeza, insomnio y aumento de peso. Como ves, el desequilibrio de estrógeno no se trata de un mal menor, ya que incluso en cuadros más graves podría llegar a provocar el síndrome premenstrual, endometriosis, infertilidad, cáncer de mama, quistes de ovario y fibromas.

Una legumbre rica en fitoestrógenos

Vistos todos los problemas que el desequilibrio de estrógeno puede provocar, es muy importante intentar equilibrar sus niveles en el organismo, y una forma fácil y nutritiva de hacerlo es mediante el consumo de garbanzos.

Estas legumbres son muy ricas en fitoestrogeno, un compuesto vegetal que desempeña prácticamente las mismas funciones que el estrógeno, por lo que resulta ideal para equilibrar sus niveles. Además, los garbanzos poseen unas marcadas propiedades antioxidantes, antimicrobianas y antiinflamatorias, así como proporcionan un buen aporte de fibra soluble, que resulta beneficioso para reducir los niveles de colesterol, da una sensación de saciedad luego de las comidas y permite regular los niveles de insulina y azúcar en la sangre.

Antes de sumar este alimento a tu dieta deberás consultar con un médico, ya que el consumo de fitoestrógenos para solucionar problemas hormonales se debe de realizar de una forma muy controlada para que no tenga contraindicaciones.

Un beneficio desconocido del hummus: antidepresivo

Comer hummus produce serotonina, la hormona de la felicidad, lo mismo que en los antidepresivos. Según una inves- tigación llevada a cabo por científicos israelíes la causa del estado de bienestar que causaba un plato de hummus regado con aceite de oliva y salpicado con pimentón a los consumidores es que contiene un aminoácido conocido como triptofen que, en buena cantidad, produce la serotonina.

El arqueólogo Abi Gofer, uno de los investigadores explicaba que un plato de hummus satisface con creces el apetito y ayuda a conciliar el sueño. Además, en el caso de las mujeres, “contribuye a la ovulación y que queden embarazadas con mayor rapidez”.

El hummus es un plato muy sencillo de realizar en casa.

Sólo hace falta un bote de garbanzos, ajo, aceite de oliva, tahini, zumo de limón y sal.

Solo hay que mezclar los ingredientes en un recipiente y batirlos con la batidora hasta conseguir una textura cremosa.

Al servir se puede adornar con un poco semillas de sésamo, un chorrito de aceite de oliva y un poco de perejil fresco.