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  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
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NUTRICIÓN

Ayunar puede ser bueno para el corazón

Abstenerse periódicamente de alimentos puede beneficiar la salud cardiovascular y el buen funcionamiento del organismo. <BR>
Ayunar puede ser bueno para el corazón





Abstenerse de ingerir alimentos o bebidas durante un período de tiempo no suele asociarse a la buena salud. Pero ahora, una nueva investigación descubrió que ayunar periódicamente podría ser bueno para la salud y el corazón.

Según los investigadores del Instituto del Corazón del Centro Médico Intermountain, en Utah, Estados Unidos, el ayuno no solo reduce el riesgo de enfermedades del corazón y diabetes, sino también provoca cambios positivos importantes en los niveles de colesterol de una persona.

El hallazgo confirma los resultados de un estudio presentado en 2007 llevado a cabo con mormones, cuyas enseñanazas religiosas incluyen ayunar durante 24 horas el primer domingo de cada mes.

Se encontró que estas personas tenían 39 por ciento menos riesgo de sufrir enfermedad de las arterias coronarias, una de las principales causas de muerte tanto de hombres como mujeres, que quienes no ayunaban.

El mismo equipo de investigadores confirmó esos resultados, y además, encontró que ayunar reduce varios factores de riesgo cardiovascular como el nivel de triglicéridos en la sangre, el peso corporal y los niveles de glucosa en la sangre.

Mientras se siguen haciendo más pruebas sobre este hallazgo, los expertos afirman que la mejor recomendación para reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares es hacer ejercicio, comer sanamente, reducir el consumo de alcohol y evitar el tabaco.

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¿Cúal es la reacción biológica del cuerpo?

El doctor Benjamin Horne, director de epidemiología cardiovascular y genética del Instituto de Corazón del Centro Intermountain, llevó a cabo dos estudios sobre los efectos del ayuno en más de 200 individuos, tanto pacientes del Centro Médico como voluntarios sanos.

Algunos de los participantes debían ayunar -bebiendo solo agua- durante un período de 24 horas y posteriormente comer una dieta normal durante las 24 horas posteriores.

Durante ese período, los investigadores siguieron un registro de los voluntarios que incluía análisis de sangre y mediciones físicas para evaluar factores de riesgo cardíaco, marcadores de riesgo metabólico y otros parámetros de la salud general.

El ayuno provoca hambre y estrés. En respuesta, el organismo libera más colesterol lo cual le permite utilizar grasa como fuente de energía, en lugar de glucosa.

Esto disminuye el número de adipositos (células de la grasa) en el organismo.

Los datos de la investigación son importantes porque confirmarían que entre menos adipocitos tenga el organismo, existe menos probabilidad de experimentar resistencia a la insulina, o diabetes.