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  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
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¿Cómo mantener un buen tránsito intestinal?

Tener una alimentación balanceada y hacer mucho ejercicio tiene un efecto positivo para nuestro organismo ayudándonos a prevenir y evitar el tan indeseado estreñimiento.
¿Cómo mantener un buen tránsito intestinal?



El intestino cumple una función primordial en nuestros organismos. Si bien antes nadie hablaba de su proceso digestivo hoy no hay por qué avergonzarse si, al ir a una farmacia, uno tiene que pedir algo para el tránsito intestinal. De hecho en las estanterías también suelen verse todo tipo de productos para mantener sano el intestino o alentarlo a la actividad. Pero ¿son realmente útiles todos esos medicamentos? ¿Son necesarios? ¿Hay productos naturales que podrían ser igual de efectivos?

El mejor modo de mantener el intestino sano es una dieta balanceada, con mucha fruta y verdura y en lo posible poca carne.

El intestino es un órgano muy complejo, con billones de bacterias que constituyen la flora intestinal. Para que esos microorganismos, fundamentales para nuestro cuerpo, puedan sobrevivir necesitan fibra, presente en la fruta y la verdura, pero también en los productos integrales, en las nueces, almendras y en el lino.

El cuerpo necesita 30 gramos de fibra por día, que serían equivalentes a tres rodajas de pan integral o 200 gramos de zanahorias u otro tipo de legumbres diarios.

Los especialistas diferencian entre las fibras solubles y las insolubles. Las solubles están más que nada en las frutas y las verduras. Se hinchan en el intestino y eso impacta en el volumen de la deposición, pero al mismo tiempo, la deposición es menos dura, con lo cual el intestino puede vaciarse sin mayor problema y con regularidad. La fibra insoluble, en cambio, son sustancias como la celulosa o la lignina, presentes en los cereales o las legumbres.

Estas últimas son importantes para la digestión, pero las bacterias prácticamente se descomponen. La consecuencia es que hay una mayor deposición y los alimentos pueden tener una pasada “rápida” por el tracto porque descartan lo que no es absorbido. También están las bacterias de ácido láctico. Si llegan con vida al intestino, pueden tener efectos positivos y hasta puede ser buenas contra enfermedades intestinales crónicas como el morbus crohn o la colitis ulcerosa.

Si bien los probióticos se consiguen en cápsulas y polvos, los especialistas dicen que no hay suficientes pruebas científicas de sus efectos.

En cambio, lo que sí está comprobado es que hacer mucho ejercicio, sobre todo aquel en el que intervengan los músculos abdominales (siempre que sea posible o no esté contraindicado) y estar en constante movimiento sí ayuda al transito intestinal.

¿Es bueno usar laxantes?

Los laxantes son medicamentos que producen un aumento del ritmo intestinal y con ello una mayor frecuencia de las evacuaciones. El problema es que muchos causan dependencia y cuando se utilizan constantemente, a largo plazo dejan de producir el efecto deseado, haciendo que el intestino “se vuelva flojo”.

Su consumo prolongado puede producir desequilibrios electrolíticos, con una pérdida especialmente elevada de potasio, ello puede ocasionar periodos de retención de líquidos, creando una aparente hinchazón y graves consecuencias para la salud. En particular para quienes sufren del corazón.

Los especialistas recomiendan que no se utilice ningún laxante sin antes haber consultado con su médico familiar.

¿Qué debemos evitar? 



Los embutidos, las carnes rojas, el cerdo.

Tampoco hace nada bien al organismo comer apurados, de pie y/o al paso.

Como es sabido, el
 peor enemigo de una buena digestión es el estrés, que puede generar desequilibrios digestivos.

Además si no come con cierta tranquilidad y mastica bien, pueden surgir dolores de estómago o hinchazón.

beber mucha agua entre horas



La falta de agua puede causar estragos en nuestra organismo y sobre todo en los procesos de digestión.

El agua ayuda a mantener el tracto gastrointestinal húmedo y las heces en movimiento, permitiendo que la comida no se estanque y pase fácilmente a través de los intestinos ayudando así a evitar el extreñimiento.

Las fieles ciruelas



Las ciruelas tienen propiedades ligeramente laxantes.

Una ciruela seca contiene cerca de un gramo de fibra.

La mejor forma de consumirlas es: Colocar unas tres o cuatro ciruelas secas en un vaso con un poco de agua antes de irse a dormir, y en la mañana ingerir la fruta junto con el líquido, durante una semana.