Los pacientes que sufren un infarto deben ser atendidos en un tiempo máximo de una hora para que el personal de salud pueda salvarles la vida, logre estabilizarlos y de esta manera se eviten secuelas posteriores. La recomendación la realiza el médico Daniel Saavedra Rodríguez, uno de los cinco cardiólogos del Centro Médico Boliviano Belga.

El profesional recomienda que las personas que acuden a los hospitales alerten a los médicos de guardia sobre sus síntomas. Por otra parte, aconseja a sus colegas someter a los enfermos a un electrocardiograma en los primeros cinco minutos, para obtener un diagnóstico preciso. “Una vez que el paciente asiste a una consulta, debe informar si fuma, si tiene problemas de presión, o si es diabético. Esto lo pone en la primera escala de consulta para que se le identifique como una persona de riesgo y hagan de inmediato un electrocardiograma”.

Para el especialista, es fundamental determinar qué tipo de pacientes son los más propensos a sufrir infartos. Los grupos de riesgo son los hombres mayores de 45 años, mujeres mayores de 50, los diabéticos, los hipertensos severos, las personas con sobrepeso y colesterol alto. “No necesariamente los muy gordos, pero sí quienes tienen mucho abdomen”.

La gente que padece de estrés también es vulnerable a problemas cardiovasculares. Entre esas personas están quienes administran elevadas cantidades de dinero y los médicos.

Saavedra dice que el 50 por ciento de los pacientes con problemas cardíacos presenta los síntomas clásicos y el 40 por ciento , signos poco convencionales. Considera que el error del sistema médico boliviano es que el paciente consulta en cualquier centro y sus síntomas se interpretan , sin hacer un electrocardiograma o una buena interrogación.

Existen muchas señales que alertan sobre el riesgo de padecer un infarto. Las más comunes son el dolor opresivo de espalda y al lado del pezón izquierdo. “La sensación es como la de un pisotón o como si alguien estuviera parado encima nuestro y se irradia al cuello, la mandíbula, los dientes, al hombro izquierdo, al codo izquierdo y al quinto y al cuarto dedo de la mano izquierda”.

Daniel Saavedra Rodríguez

CARDIÓLOGO

El médico se especializó en cardiología clínica en el Hospital Bernardino Rivadavia de Buenos Aires y en la Universidad del Salvador. Realizó su

subespecialidad en cardiología y angiología intervencionista en la Universidad de Buenos Aires. Fue parte del equipo de Luis De la Fuente en el Instituto Argentino de Diagnóstico y Tratamiento,

y en la Clínica Suizo Argentina. El profesional insiste en la importancia de realizar un diagnóstico preciso y veloz en personas con enfermedades cardíacas, para evitar tratamientos inadecuados. “He visto miles de veces pacientes que han llegado con infartos previos que están tratados, equivocadamente, por gastritis”.

Hay señales que alertan de un ataque al corazón

El dolor opresivo en el pecho y en la parte superior del cuerpo son los síntomas más comunes de un ataque al corazón, pero hay otras señales de advertencia a las cuales también se debe prestar atención. Reconocer los signos de un infarto y llegar al hospital a tiempo puede ser la diferencia entre vivir y morir.

La falta de aire es un síntoma sutil de un ataque al corazón que no debe tomarse a la ligera. Es muy diferente a la falta de aire relacionada con otras enfermedades, ya que esta aparece de la nada. Los pacientes describen la falta de oxígenos como si hubieran estado ejercitándose demasiado, a pesar de que han estado sentados y relajados.

PON ATENCIÓN AL DOLOR DE PECHO

Un dolor en el pecho, ya sea agudo o suave, es el signo más común de un ataque al corazón. Las personas que lo han sufrido dicen que sienten una sensación de opresión en el centro del pecho, que puede durar pocos minutos.

El dolor en el pecho no siempre estará presente cuando se presenta un ataque al corazón. Más de la mitad de pacientes que sufrieron infartos no presentaron este síntoma.

MOLESTIAS EN LA PARTE SUPERIOR DEL CUELLO

Se debe acudir a consulta si hay molestias en la parte superior del cuerpo. A veces, el dolor de un ataque al corazón se irradia desde el pecho hacia afuera, causando malestar en el cuello, el abdomen, la espalda e incluso los brazos. La molestia en estas áreas suele ser leve.

Este tipo de molestia puede ser una señal de que se está presentando un ataque al corazón.

MAREOS Y DESMAYOS

Los mareos, el aturdimiento y los desmayos también son síntomas comunes de un ataque al corazón, a pesar de que no están presentes en todas las personas.

El malestar no debe ser ignorado, especialmente, si también se siente dolor en el pecho.

Las mujeres tienden a presentar estos síntomas con más frecuencia que los hombres; aunque no todas los experimentan.