La utilización de los implantes después de la mastectomía
Los implantes se insertan debajo de la piel o del músculo del pecho después de la mastectomía. En la mayoría de estos procedimientos, se usa una técnica llamada mastectomía con preservación de piel, en la que se conserva la mayor parte dérmica del seno para usarla en su reconstrucción. Los implantes se colocan en dos etapas. En la primera, el cirujano coloca un aparato llamado expansor de tejido debajo de la piel que quedó después de la cirugía o debajo del músculo del pecho. El extensor se llena lentamente con solución salina en visitas periódicas al doctor después de la operación. En la segunda etapa, después de que el tejido del pecho se ha relajado y ha sanado lo suficiente, se quita el expiaros y se reemplaza con un implante.
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OPERACIONES
EN EL ROSTRO
El lifting o estiramiento facial es una intervención quirúrgica para reparar la piel de la cara y cuello marchita, arrugada y hundida que se produce por el paso del tiempo, por una dieta alimenticia pobre o también por tendencia hereditaria. Se realiza quitando el exceso de grasa, tensando los músculos principales, y rellenando la piel de la cara y cuello. Se puede hacer con anestesia local (el paciente está adormilado y sin dolor) y general (en la que el paciente está profundamente dormido).
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respuestas para
las quemaduras
En casos de los pacientes que han sufrido quemaduras, los médicos cirujanos intentan restablecer el tejido dañado. Se trata de una tarea compleja y, cuando las quemaduras son graves, resulta imposible y se debe acceder a los implantes de piel. En las cirugías plásticas reparadoras se procura devolver al paciente las funciones que perdió la piel por la quemadura. Por esta razón se intenta restablecer el tejido dañado, buscando la regeneración natural de las células.
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Operaciones de labio y
paladar hendido
Los especialistas en cirugía plástica, junto con un equipo interdisciplinario, son los responsables de corregir, con al menos cinco operaciones, la deformación del labio y paladar hendido de los niños. Carlos Dorado explica que el primer procedimiento se lo realiza a los tres meses. Antes, los padres deben llevar al paciente a un centro para recibir una placa que permita alimentarse sin riesgo de atragantarse. Al año se opera el paladar y a los siete se mejorar el maxilar superior. La última es a los 17, para corregir la nariz.