Desde su estreno hace dos semanas, la última saga de Star Wars está batiendo récord en las salas de cine donde se exhibe. Uno de los lugares que más llama la atención es la locación de Crait, el planeta donde se libra la última batalla entre la Resistencia Rebelde y la Primera Orden.

Apenas salió el tráiler de la película hace unos meses, se identificó al Salar de Uyuni en varias escenas. Y como dice National Geographic, “no podía haber mejor localización para el lugar donde se ubica la base Rebelde, uno de los cinco desiertos de sal más grandes del mundo. Este salar, en el extremo sur del altiplano boliviano es uno de los paisajes más bellos de América del Sur. Sus características lo acercan a Crait de la saga Star Wars: un planeta mineral cubierto en su totalidad por sal blanca.

En los últimos años, Bolivia ha sido el escenario para la filmación de varias películas extranjeras de diferente nacionalidad.

Hace siete años se filmó en Cochabamba el 95 por ciento de la película “También la lluvia”, una coproducción española, méxicana y francesa, dirigida por Icíar Bollaín.

En 2015, el director de cine alemán Werner Herzog llegó a Bolivia para filmar la película, “Sal y fuego”, que se realizó en Potosí y Santa Cruz. Este año, el reconocido actor y director estadounidense, Morgan Freeman, visitó por primera vez Bolivia y rodó escenas de la segunda temporada de la serie documental “La Historia de Dios”, de National Geographic.

Hay otras películas que se grabaron en el país o que estuvieron basadas en historias ocurridas en Bolivia, como la Jungla, donde el actor Daniel Radcliffe, personificó a Yossi Ghinsberg, un aventurero y escritor israelí, que permaneció perdido en la selva del Madidi.

Como sostiene el crítico e investigador de cine Sebastián Morales Escoffier, en un artículo publicado en el portal cinemascine.com: “Hay que reconocer que un país como Bolivia es, sin duda, un atractivo destino para cualquier tipo de producciones cinematográficas. Desde la enorme pluralidad cultural que existe, pasando por los bellos paisajes fotográficos que encontramos casi a la vuelta de la esquina, hasta por la llamativa situación política que vive el país desde siempre, y terminando por los curiosos visitantes que han decidido pasar los últimos días de su vida en Bolivia (Butch Casidy, el Che Guevara, Klaus Barbie, que tienen cada uno al menos una película sobre su estancia en el territorio nacional)”.

El director de Our brand is crisis, David Gordon Green, otra película filmada en Bolivia, dice que es un lugar maravilloso para hacer una película y cree que sería muy beneficioso para la industria del cine tener presencia en el país.