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  • Diario Digital | sábado, 20 de abril de 2024
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Trastornos Alimentarios: Más allá de la comida

Programa de salud. El centro para transtornos alimentarios S.E. Di Valda inicia mañana su campaña de sensibilización de esta problemática que está creciendo en el departamento.<BR>
Trastornos Alimentarios: Más allá de la comida

EMOTIVIDAD AFECTADA

VIVIR DENTRO DE una pesadilla Mañana inicia la campaña departamental de prevención contra los Trastornos Alimentarios y la Obesidad, un programa llevado adelante por Santiago Valda, licenciado en psicología, y Elba Gamboa, licenciada en nutrición.

Lorena, nombre cambiado, era una adolescente de 14 años cuando estaba organizando su fiesta de 15.

Boutique tras boutique, vestido tras vestido, no encontraba nada que le haga o que le guste, siempre era muy estrecho para su cuerpo contorneado. Las vendedoras hacían todo lo posible por ayudarle, y sacaron todos los modelos del colgador, pero no había suerte.

Poco a poco, la salida para buscar su vestido soñado se convirtió en una pesadilla. La vergüenza se transformó en molestia y las lágrimas comenzaron a correr sin control por su terso rostro. Ella no decía nada, pero los reproches eran internos y más se aferraba a la idea de poseer aquel vestido de gasa color nude, con lentejuelas, que deseaba para su primer baile de vals. Pero, claro que para todo hay solución, Lorena se mentalizó en hacer un poco de dieta y así poder bajar de peso y lucir el vestido de sus sueños. Fue así como inició la dieta, unos meses antes de la fiesta de 15 años; pero, tres años más tarde, Lorena sigue controlando su ingesta de alimentos, porque se sigue sintiendo gorda, aunque ya solo 43 kilos cubren el cuerpo de una muchacha de 170 centímetros de alto. Ahora, ya no es cosa de imagen, hoy el problema ya es cuestión de vida o muerte. Sin darse cuenta Lorena es parte del 8 por ciento de la población que sufre de trastorno de alimentación, un mal que afecta y carcome, no solo a la paciente, sino también a la familia, que en algunos casos ya no sabe qué hacer.

DIAGNÓSTICO CLÍNICO

Este es uno de los muchos casos que actualmente tratan Santiago Valda, de profesión psicólogo con especialidad en trastronos alimentarios y la obesidad, y la nutricionista, Elva Gamboa en el Centro para Trastornos Alimentarios S.E. Di Valda, en su “Clínica del día”, ubicada en la Demetrio Canelas #300, casi es- quina Atacama.

Valda asegura que Cochabamba es una de las cinco clínicas apoyadas por los profesionales del Instituto de Trastronos Alimenticios (ITA), de España. Es que el profesional logró hacer prácticas en este centro, luego de obtener su Master en la Universidad de Barcelona y precisamente es con ellos que está encarando la campaña de Trastornos Alimentarios: Más allá de la comida.

“En Bolivia existe muy poca educación e información sobre los trastornos alimentarios. Estas son enfermedades mentales graves y en los últimos años se ha incrementado”, asegura el profesional, quien además, afirma que en Cochabamba no existen datos estadísticos del tema, lo que genera incertidumbre en los profesionales de la salud.

Esta campaña de prevención está diseñada en tres: la 1ra fase de sensibilización en las farmacias, 2da fase de prevención en gimnasios y centros deportivos y 3ra fase prevención en colegios de nivel secundario.

“Se trata de un proyecto a largo plazo, tomando en cuenta que solo el programa de prevención tendrá una duración de ocho meses, donde participan psicólogos, nutricionistas y voluntarios, quienes intentarán llegar a la población cochabambina.

“Se trabajará con los jóvenes de 12 a 13 años, como el público meta, ya que es la edad en la cual debutan en el inicio de trastornos de alimentación, tanto hombres como mujeres.

Tenemos que lograr una relación sana entre comida y el cuerpo, enfocarnos en los imágenes más reales”, asevera el psicólogo. Y para ello, hay que lograr detectar la enfermedad de manera temprana, motivo por el cual se desarrolla este programa.

¿Qué son los trastornos alimen-tarios (TCA)?

Santiago Valda (SV): No son enfermedades nutricionales, no solo se trata de aprender a comer.

No es una decisión, no es tema de moda, no es un capricho. Es un trastorno emocional, psiquiátrico y mental, que ha sido clasificado como tal dentro del manual de los trastornos mentales. En otras palabras, son enfermedades graves con gran riesgo de cronificarse.

¿Qué tipo de tratamiento necesitan estas personas?

SV: Considero que nunca funcionará un tratamiento aislado, llevado adelante por un solo profesional. Lo que se necesita es una terapia interdisciplinaria, es decir, un equipo en el que participen varios profesionales con diferentes especialidades como: psicólogos, psiquiatras, nutricionistas, médicos, endocrinólogos.

Este tipo de trabajo no es corto, más al contrario es de años, las recaídas son muchas y hay que hacer un seguimiento prolongado, sobre todo en la problemática de la anorexia y la bulimia, de tipo crónico, tiene un efecto devastador, hasta en las familias, porque son enfermedades que erosionan el alma, ya que han perdido la esperanza en los tratamientos y muchas veces son incapaces de aceptar que el ser querido tiene una enfermedad crónica.

¿Causas de los TCA?

SV: En cuanto a las causas relacionadas con la aparición de los TCA, podemos decir que ante una vulnerabilidad genética que parece demostrada se unirían una serie de factores que facilitarían la expresión de los TCA.

La idea fundamental es que si estos pacientes se tratan a tiempo, existe menos riesgo de cronificación y el pronóstico sería más alentador. Las autolesiones también son muy habituales en los Trastornos Alimentarios.

¿Los TCA solo afecta a mujeres?

SV: La proporción sería de 9 mujeres frente a un hombre. En los trastornos alimentarios, el porcentaje de mortalidad está en torno al 8 a 10 por ciento .

¿Cuál es el principal factor de riesgo?

SV: El principal factor de riesgo es hacer una dieta, pero, a la vez es muy inespecífico ya que no condiciona que la mayoría que haga dieta necesariamente va a tener un TCA. Lo que sí está claro es que todos los que han sido diagnosticados con esta enfermendad de un TCA comenzaron con una dieta restrictiva.

¿Algunas recomendaciones para los lectores de la revista Así?

SV: Si comienza a notar cambios en su hija o hijo como, por ejemplo, a la hora de comer se pone más quisquilloso, si va al baño después de comer, si corta la comida en trozos pequeños, o se demora mucho en ingerir sus alimentos, o se pone de mal humor, o evita ciertos alimentos o tiene comidas prohibidas, o últimamente está más preocupado por su peso y la comida. Son señales de alerta. Además si esta más aislado, ya no sale mucho con los amigos, no habla mucho con la familia, puede ser un indicativo de que su hijo o hija padezca algún TCA, para eso es importante que visite a un especialista, mientras más rápido se detecta el problema alimentario la superación del mismo va a tener mejores resultados.

Apuntes

Aunque los trastornos alimenticios pueden comenzar con preocupaciones por la comida y el peso, son mucho más que solamente comida. La gente con trastornos alimenticios utiliza la comida y el control de la comida como un intento para compensar los sentimientos y emociones que de otra manera son vistas como insoportables. Para algunos, la dieta, los atracones y la purgación pueden comenzar como una forma de lidiar con las emociones dolorosas y para sentirse en control de su vida personal, pero al final estos comportamientos dañan la salud física y emocional, la autoestima y la sensación de competitividad y control de la persona.