Opinión Bolivia

  • Diario Digital | jueves, 28 de marzo de 2024
  • Actualizado 17:40

ENTREVISTA A ANA MARÍA ÁLVAREZ, DIRECTORA DE LA COMPAÑÍA CONTRA-TIEMPO, QUE MAÑANA LUNES DICTARÁ UN TALLER DE DANZA

“Este mundo sería más compasivo si viviéramos de la misma manera en que bailamos”

“Este mundo sería más compasivo si viviéramos de la misma manera en que bailamos”



Contra-Tiempo es una compañía de danza con sede en Los Ángeles (Estados Unidos), dedicada a transformar el mundo a través de la danza. Este año nuestro país ha sido incluido en su gira por Sudamérica, gracias al apoyo de la Embajada de los Estados Unidos y el programa DanceMotion USASM, producido por la Academia de Música de Brooklyn (Brooklyn Academy of Music, BAM), que tiene como objetivo mostrar la mejor danza estadounidense contemporánea y, al mismo tiempo, facilitar el intercambio cultural. Tras visitar Santa Cruz, la compañía se encuentra en Cochabamba dictando varios talleres de ingreso gratuito, dirigidos a todo público. Mañana lunes concluye su gira en nuestra ciudad con tres talleres (ver programa). 

Conversamos con Ana María Álvarez, directora de la compañía, coreógrafa cubano-estadounidense, quien, en su tesis de Maestría, exploró la abstracción de la “danza latina”, específicamente de la salsa, como una manera de expresar resistencia social dentro de la lucha migratoria en EEUU. La tesis se convirtió en una obra llamada Contra-Tiempos/Against the Times, que eventualmente fue el impulso fundador de la compañía del mismo nombre en 2005.

-Contra-Tiempo es una compañía que agrupa a bailarines de distintos lugares y, además, tiene un trabajo con diferentes géneros de danza (salsa, afrocubana, hip hop, danza teatro, urbana y contemporánea), ¿Cómo está diversidad ha enriquecido y/o conflictuado su trabajo?

Mi trabajo como coreógrafa es una reflexión de mi vida. He crecido en un mundo multilingüe y mi formación como bailarina viene de muchos lugares distintos. Como bailarina y artista yo soy una manifestación o un resultado de estas fusiones. No existiría otra forma en la que podría trabajar, porque la diversidad es quien soy yo. La compañía de danza Contra-Tiempo tiene la capacidad de conectar con otras comunidades, porque hablamos varios idiomas de danza (los diferentes géneros) y varias lenguas entre los integrantes (inglés, español, portugués), que nos ayudan en la capacidad para conectar con las audiencias. 

-¿Cómo, desde la danza, se puede pensar en hacer cambio social?

Para mí, la danza tiene la capacidad de trascender estereotipos y preconceptos. A través de nuestro movimiento corporal podemos llegar a conocernos individualmente como personas y así podemos llegar a entendernos como comunidad. Para mí, la danza es una metáfora de cómo el mundo podría trabajar, ya que nos conecta de manera auténtica con otra persona. Por ejemplo, al mirarse a los ojos, al usar empatía cuando bailas, al ponerse en el lugar de la otra persona. El movimiento de uno afecta el movimiento del otro. Nosotros en inglés usamos la frase “compassionate partnership”, que significa la relación entre el líder y el seguidor, que es una relación de comunicación que implica escuchar al otro. Yo creo que este mundo sería más compasivo si viviéramos de la misma manera en que bailamos. El cambio social tiene que comenzar a nivel individual, luego en pareja, para luego hacer impacto en la comunidad. 

-En sus últimas obras, ¿cuál ha sido el tema abordado y cuál el proceso creativo?

En las últimas obras hemos explorado temas de migración, las conexiones y luchas entre afroamericanos y latinoamericanos en Estados Unidos, temas de género, explorando, cambiando e intercalando las relaciones y roles entre hombre y mujer para desarmar estereotipos, y el tema más reciente es uno que explora la comida y la cultura consumista. La comida en una serie de decisiones, opiniones, que reflejan la cultura excesivamente consumista de nuestros tiempos.

Mi proceso creativo generalmente comienza con la idea de un tema que quiero explorar: busco música, sonidos o poemas y luego comienzo a improvisar inspirada por esta idea. Mi proceso también es colaborativo. Me gusta trabajar con bailarines que tienen estilos distintos y darles la oportunidad de improvisar y traer su propia manera de moverse. Siento como si estuviera mezclando ideas, estilos y perspectivas en una salsa de muchos sabores. 

-¿Por qué se eligió a Bolivia, Chile y Ecuador para su gira por Sudamérica? ¿Qué ha significado para el grupo esta gira?

La decisión de los países a visitar en esta gira fue de las Embajadas de Estados Unidos en los diferentes países que visitamos. Cada país tiene su propia personalidad y el trabajo de Contra-Tiempo ha sido distinto. Para nosotros es increíble estar en tantos lugares donde podemos aprender más sobre el poder de la danza para conectar comunidades distintas y compartir la esperanza para el futuro a través del baile. Como humanos aprendemos a compartir nuestros idiomas, el amor por el movimiento, la libertad que sentimos cuando bailamos. Puede haber tensiones políticas entre los gobiernos de los países, pero la danza nos iguala a todos, no hay jerarquías y todos tenemos algo para compartir. El arte tiene la capacidad de tocar temas sociales complejos de una manera que une y no divide. 

- ¿Cómo ven el movimiento de danza en Bolivia, Chile y Ecuador?

Hemos tenido la oportunidad de ver danzas folklóricas, contemporáneas y fusiones. En Santa Cruz vimos una demostración de saya y hemos podido compartir nuestros movimientos con bailarines de breakdance. La parte de compartir es un momento muy importante en los talleres.  En Ecuador y Chile vimos mucho de danzas indígenas mezcladas con técnicas contemporáneas. Estuvimos trabajando con grupos profesionales y también con escuelas de danza. Tenemos muchas expectativas de conocer el movimiento de baile de Bolivia. 

-Este lunes 16 darán un taller de “Rueda” en la ciudad de Cochabamba. ¿Cuál es la dinámica y quiénes pueden participar?

La rueda es una danza donde se baila en pareja pero en un gran círculo. Todos pueden participar, gente con experiencia o que nunca ha bailado. En inglés decimos que la rueda es un “equalizer”, es decir, es un baile de comunidad donde no importa cuál es tu nivel, ya que el grupo apoya a los principiantes. Vamos a aprender bastantes pasos de rueda y, al finalizar la clase, vamos a bailar todos unas ruedas completas.

Programa: Lunes 16 de junio

10:30: Taller de técnicas de danzas urbanas

16:00: Taller de Salsa y Break Dance

Lugar: Martadero (avenida 27 de Agosto y Ollantay)

19:30: Taller de Rueda

Lugar: Centro Boliviano Ámericano (calle 25 de Mayo N-0356)

 www.arteriasurbanas.org