Le transmitieron VIH en su primera relación sexual
Muchas de las grandes batallas son en silencio, invisibles; se libran en la vida de las personas y, a veces, terminan en la convivencia con el enemigo, que se vuelve un compañero, incluso un amigo.
Giovanni (nombre que protege la identidad del joven) tiene su batalla personal desde los 13 años, ahora ya tiene 27 y el detonante fue cuando se infectó de Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH).
Se infectó en su primera relación sexual.
Por eso, el estigma, la discriminación y sus temores se convirtieron en sus batallas personales.
HISTORIA
“La primera experiencia sexual que tuve fue por presión de grupo. No supe en el momento que me infecte, sino hasta dos años después. Es un momento bien duro porque uno piensa ¿qué voy a hacer?. ¿voy a dejar de estudiar? ¿hasta aquí llegó mi vida?. ¿cómo decirle a mi familia?. Se me vinieron muchas preguntas a la mente”.
Añadió que no tenía mucha información. Y, frecuentemente, se preguntaba: “¿Cuándo voy a morir?, ¿En qué momento voy a morir? ¿cómo voy a morir?. Porque la carta de presentación del VIH es la carta de muerte. Pero, con el tiempo lo asimile”.
Giovanni aceptó que era portador del virus, pero el peso de la discriminación marcaba su vida.
“Me señalaban, cuando decían el diagnóstico; para mi fue una etapa dura. Uno siente que no quiere salir de donde está o taparse para que no lo vean. Me sentí humillado, impotente por no poder defenderme. Fue una carga emocional bien fuerte, no había día que no llorara, siempre he llorado en silencio y se me venía a la mente todo lo que había vivido”.
RESPALDO
El hermano de Giovanni fue su apoyo y el primero que se entero de su diagnóstico.
“Pero, luego se lo tuve que decir a mi mamá para poder bajar la carga emocional que en ese momento tenía”.
El, entonces, adolescente estuvo 24 meses guardando el secreto del diagnóstico, muchos sentimientos y el recuerdo marcado del sábado 13 de mayo.
El responsable de Giovanni ante las autoridades sanitarias fue, por mucho tiempo, el hermano mayor del entonces adolescente.
Cuando su madre recibió la noticia, se volvió un pilar fundamental en las batallas de la vida del muchacho.
Cuando era adolescente, Giovanni tuvo miedo de que se conociera su diagnóstico, de que la gente dijera que le tenía “asco”, de que lo discriminaran; todo eso lo impulsó a ser muy disciplinado con sus medicamentos. “Yo no quería que me vieran enfermo, tenía que tomarme mis medicamentos; a veces salía y llevaba mi pastilla envuelta en algo. Cuando estaba en la escuela y me tocaba tomarla, yo decía que iba al baño y aprovechaba para tomarlas”.
SU VIDA
La vida sentimental de Giovanni también ha sido afectada por el diagnóstico. “En mi vida he tenido tres parejas, dos me despreciaron por mi diagnóstico, cada episodio te deja marcado. Uno piensa que por ser sincero con el diagnóstico le viene el rechazo. Con mi pareja actual desde el inicio le dije lo que tenía y aceptó. Pero para decir sí, pasó bastante tiempo”.
IMPULSO
Esas situaciones, los temores vividos, la etapa de negación que superó, fueron los que impulsaron a Giovanni ha convertirse en activista en defensa de los derechos de las personas que son portadoras y viven con el virus.
“El VIH no es ninguna barrera para mí, la barrera está en tu cabeza. Uno decide hasta dónde va a llegar; yo decidí brincar más alto y decirle a las personas con VIH que tener el diagnóstico no te hace inferior, eres igual que los otros y puedes ser mejor”, dijo.
Estudió enfermería y trabaja, actualmente, en un hospital público.
“El virus es un amigo mío, que esta dentro de mi y que necesita alimentarse. Se tiene que aprender a vivir con lo que está a la par de uno, el que está a la par mía, esta vez, es el VIH. Si no me alimento bien, va a estar mal el que está a la par mía”.
Hace cinco años, Giovanni perdió el miedo a responde ante los cuestionamientos de su condición médica, diciendo: “Yo tengo VIH”.
Detalle
El Virus de Inmunodeficiencia Humano (VIH) se transmite mediante el contacto con la sangre, el semen o los fluidos infectados.
1 Dato
Al cabo de pocas semanas de la infección con el VIH, pueden aparecer síntomas como fiebre, dolor de garganta y fatiga. Luego, la enfermedad suele ser asintomática hasta que llega a la fase de SIDA.
CURIOSIDADES SOBRE EL VIRUS
2.9 millones de personas en terapia
El VIH/SIDA sigue siendo uno de los más graves problemas de salud pública del mundo, especialmente en los países de ingresos bajos o medianos. A mediados de 2017, 2.9 millones de personas estaban recibiendo terapia antirretrovírica en todo el mundo.
Tres maneras de prevenir el VIH
Según la Organización Mundial para la Salud (OMS), la prevención sigue siendo la mejor arma para evitar el contagio. La utilización del preservativo al mantener relaciones sexuales, usar agujas desechables y someterse a pruebas de detección habitualmente son las más populares y recomendadas.
El origen de la enfermedad
El origen del Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) fue en África, tras saltar este de los simios a los humanos, aunque tardó muchas décadas en llegar a la población de los países occidentales, vía Haití.
Descubrimiento que frenó las muertes
La azidotimidina (AZT) fue el único medicamento que consiguió frenar las muertes que supuso el SIDA en los años 80 y principios de los 90.
Su descubridor, Jerome P. Horwitz, lo ideó en 1964 y lo puso "en un estante" al ver que no tenía actividad anticáncer.