Bertrand Gerboulet llegó a Bolivia hace 14 años, con muchas ganas (y curiosidad) de descubrir que había de este lado del mundo. Después de la experiencia que tuvo como viajero, decidió volver al país en 2005 para probar suerte haciendo lo que más le gusta: cocinar.

En 2009, luego de algunos viajes de ida y de vuelta desde el Viejo Mundo, apostó quedarse definitivamente en la Llajta y abrir su propio restaurante llamado “Cilantro”.

Por varios motivos, ese proyecto tuvo que ser cancelado, pero él no desistió de seguir emprendiendo nuevos retos, entre ellos ser docente de un instituto gastronómico, una experiencia que disfrutó durante un año.

Beltrand creció en Lyon, un pequeño pueblo de Francia. Desde chico aprendió a ser muy sociable, desde la cocina del bar restaurante de su padre, de quien también heredó la pasión de cocinar, gracias a que sus antepasados se dedicaban a producir embutidos y carnes frías.

El más reciente desafio de este chef empírico es “French Touch”, un pequeño snack que maneja el concepto de comida para llevar con un toque francés.

Entre las propuestas que se pueden disfrutar son masitas francesas (hechas de brioche, masas quebradas, de mil hojas ) y también pizzas de distintos sabores.

Próximamente, además se podrá degustar de almuerzos hechos con recetas francesas.

Dirección: General Achá entre Junín y Hamiraya (teléfono 70399111).