Estimadas Mamás y Papás, el Estado Plurinacional de Bolivia interpuso una demanda ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, contra el país chileno, para que esta instancia jurídica establezca el espacio de diálogo entre ambos países y así, dar solución a la mediterraneidad boliviana.

Es de conocimiento de cada boliviana y boliviano, que desde finales del siglo XIX fueron varios los acercamientos, compromisos y gestiones en busca de una solución para que Bolivia tenga un acceso soberano al océano Pacífico, lamentablemente no se pudo hacer real ningún acuerdo. Un ejemplo de este incumplimiento ha sido la agenda bilateral de los 13 puntos, efectuada el 2006 por la presidenta chilena, Michelle Bachelet y el presidente boliviano, Evo Morales, que incluía como punto VI, el tema marítimo.

Por esta razón, ante la demora e incumplimiento total de justicia, la demanda boliviana reclamó el cumplimiento de estos compromisos formulados por presidentes, ministros de Relaciones Exteriores y representantes diplomáticos de Chile, mediante actos unilaterales y convencionales.

Han transcurrido casi 5 años desde que el Estado Plurinacional de Bolivia interpuso la demanda en la CIJ, y como Madres y Padres bolivianos debemos cultivar el anhelo patriótico por recuperar, la salida al mar.

El documento elaborado por el Ministerio de Relaciones Exteriores, denominado “Bolivia y su demanda marítima”, señala la importancia de “crear un espacio de diálogo en el que ambos países de manera conjunta y velando por sus respectivos intereses puedan encontrar una solución al problema del enclaustramiento boliviano que durante más de 100 años ha constituido un obstáculo en sus relaciones”.

Sigamos unidos por la reivindicación marítima, aparte de ser una demanda justa, es un derecho irrenunciable e imprescriptible tener un acceso a las costas del Pacífico, así lo señala nuestra Constitución Política del Estado en su artículo 267.