Opinión Bolivia

  • Diario Digital | lunes, 18 de marzo de 2024
  • Actualizado 22:57

SIN IMPORTAR QUIÉN SEA EL INVERSIONISTA

Veizaga ofrece ceder terreno para construir nueva terminal

Urgió contar con otra edificación ante el inminente colapso de la actual. El rédito para la sociedad que forma con los choferes de flotas estaría en abrir negocios conexos alrededor.
Veizaga ofrece ceder terreno para construir nueva terminal

El empresario Jaime Veizaga manifestó que la sociedad Terminal de Buses Cochabamba SA, conformada por él junto al Sindicato de Ómnibuses, está dispuesta a ceder el terreno de Albarrancho para la construcción de una nueva terminal, sin importar el origen del capital.

En el programa Contacto OPINIÓN, que se transmite por Radio San Rafael, dijo ayer que ante el inminente colapso de la actual infraestructura es urgente contar con otra edificación.

“Estamos abiertos a que lo haga la Gobernación, la Alcaldía o a hacer una alianza público-privada, lo principal para nosotros es que alguien lo haga”, manifestó.

Dijo que si surge otro proyecto en otro terreno, también apoyarán la propuesta.

Recordó que esa predisposición ya fue expresada en 2017, cuando solicitaron que la Alcaldía se haga cargo de la construcción.

“Inicialmente ofrecimos al municipio que construya y que nosotros cederíamos el terreno. Lo mismo se ofreció a la Gobernación”, señaló.

A la fecha, ninguno de los dos niveles de gobierno presupuestó recursos.

En una entrevista anterior, Veizaga explicó que si cedían su terreno, la sociedad de la que es parte obtendría rédito instalando alrededor negocios conexos como hotelería, restaurantes, terminales de carga y otros similares.

Pese a que el Concejo municipal emitió dos leyes para viabilizar la construcción en Albarrancho y que la Gobernación le concedió licencia ambiental, el gobernador Iván Canelas declaró que no es viable por estar junto a una planta de tratamiento. No explicó por qué se le concedió licencia ambiental.

Pese a que no hay luz verde para la obra, Veizaga dijo que recibió la aprobación para el financiamiento de los 170 millones de bolivianos necesarios a través del mercado de valores, pero le exigen que haya apoyo al proyecto para hacer el desembolso. La construcción tomaría 18 meses.