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  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
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Los botaderos y la salud pública

Los botaderos y la salud pública
Disponer adecuadamente los residuos sólidos y líquidos en una ciudad bien planificada debería ser un mero trámite, sin embargo, en Cochabamba, en 43 de sus 47 municipios, es un dolor de cabeza que no se puede resolver hasta la fecha, y, lamentablemente, no se lo podrá solucionar en un largo plazo.

Casi la totalidad de los municipios de Cochabamba, y también del país, tienen simples botaderos, donde la basura es arrojada y no recibe tratamiento, excepto, no en todos los casos, una capa de tierra que lo único que hace es ocultar el problema por un tiempo, como cuando llegan visitas a nuestro hogar y solo atinamos a ocultar todo bajo la alfombra o dentro del ropero.

Esa no es, definitivamente, la solución. Lo que se debería hacer es implementar, de una vez por todas, el tan mentado proyecto de una planta de tratamiento de residuos, con la posibilidad, incluso, de industrializar parte de los desechos para generar recursos económicos y energía alternativa.

Las propuestas que hacen conocer autoridades municipales y de la Gobernación, cada cierto tiempo, al parecer son solo tablas de salvación para salir del atolladero en el que se encuentran.

Si hay una solución factible, que se pueda implementar a mediano plazo, las autoridades deberían anunciarla por todos los medios, conseguir presupuesto y ejecutar la obra. Pero si saben que no es posible solucionar este problema, tendrán que ser honestas y decirlo.

Un sinfín de reportajes publicados por medios impresos y televisivos muestran, en forma recurrente, con imágenes, botaderos con desechos a cielo abierto que contaminan el aire, la tierra y el agua, sin que nadie tome medidas para terminar con esta situación.

En las últimas horas, un informe del secretario de la Madre Tierra de la Gobernación de Cochabamba, Gonzalo Muñoz, alertó que la falta de estudios de preinversión y predios son dos de las principales dificultades que encaran las alcaldías para adecuar sus botaderos. Otros municipios ven un obstáculo en la disponibilidad de recursos económicos, según una nota publicada por OPINIÓN este jueves 13 de junio.

La falta de estudios se resuelve convocando a profesionales técnicos especialistas en la elaboración de proyectos, que seguramente hay en el departamento, por lo que las alcaldías deberían tomar decisiones rápidas para buscar entre su personal o contratar a externos.

Respecto a predios para instalar las plantas de tratamiento, porque deberíamos desechar la idea de simples botaderos, las autoridades tienen la tarea de persuadir a los vecinos sobre las ventajas de instalarlas en sus municipios, guardando la distancia correspondiente con los centros urbanos.

Y la población en general debe entender que no se puede oponer a la implementación e un proyecto de servicio básico que esté bien planificado, porque eso repercutirá en beneficio de toda la comunidad y no solo de un sector.

La situación precaria de los botaderos es un atentado contra el medioambiente y la salud de la población. En los casos más extremos, hay municipios que arrojan la basura en ríos, caminos y áreas verdes.

Es urgente implementar, a la brevedad posible, plantas de tratamiento de basura. No es posible que sigamos como hace dos siglos. Un inadecuado tratamiento de la basura pone en riesgo la salud y vida de los pobladores, de todo el departamento y no solo de un sector.