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  • Diario Digital | jueves, 25 de abril de 2024
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Aguas de Misicuni sin destino

Aguas de Misicuni sin destino
Después de 47 años de haber decidido ejecutar el Proyecto Múltiple Misicuni, que aún no se haya definido quién administrará la provisión de agua es algo fuera de serie, 36 años transcurrieron desde que se empezó la construcción del túnel y 10 años del inicio de obras de la represa. Eso demuestra que la obra está contaminada por la política que no vela por el bien común.

Cuando se empezó a construir la presa, en 2009, los ingenieros eméritos habían advertido que era urgente organizar una empresa que administre el agua, destinado para consumo humano, riego y energía. No era suficiente solo exigir que se terminen las obras, lo más difícil sería cómo conciliar los tres factores, entregar el agua y lograr el pago respectivo, su valor debió estudiarse para que sea rentable y sustentable. A la fecha, hay 100 millones de metros cúbicos de agua almacenada, el único cliente es Semapa, que consume 18 millones, el resto está durmiendo en la cordillera. Hay un desfogue adicional de 150 litros por segundo para los regantes del sector, no pasa de otros 6 millones, o sea que más de 75 millones están durmiendo.

¿Cómo se puede entender? 470 millones de dólares invertidos en los estudios y obras y no están siendo debidamente utilizados, solo se usa un 18 por ciento para fines de consumo humano y 7 por ciento para riego, es decir que hay capacidad ociosa en el orden del 75 por ciento .

Y qué falta para que realmente se consolide lo que en los años 70 se delineó. Decisión política, guiada por un ente técnico de verdad.

La primera tarea, construir los tres ductos con una inversión de 70 millones de dólares, llenar de tuberías de agua, alcantarillado y 9 plantas de tratamiento de aguas negras en los 7 municipios, con 200 millones de dólares (datos del Plan Maestro 2014).

El segundo elemento, todo el sistema de riego hacia La Maica, Quillacollo y Sacaba con tecnología de avanzada que optimice el consumo, así se evitará usar aguas negras del río Rocha. La inversión sería 40 millones de dólares.

Finalmente, el tercer elemento, energía. ENDE tiene instaladas en Jove Rancho 4 turbinas, solo usa dos. Falta agua, deben construir el trasvase de Putucuni y Vizcachas que generarán en total 120 megavatios, inversión que puede ser de 100 millones.

¿Para qué hicimos las obras del anhelado Proyecto Múltiple Misicuni? La historia nos juzgará.