El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), el uruguayo Luis Almagro, visitó el viernes la humilde casa donde habitaba el presidente Evo Morales, en la región del Chapare, desde donde emergió como dirigente y mandatario de la nación.
Tras un recibimiento cariñoso de los pobladores de esa región, que le colocaron una corona de hoja de coca en el cuello, Almagro expresó su admiración por el cariño y la calidez que expresaron los cocaleros y productores de fruta de la comunidad de Chipiriri, en el municipio de Villa Tunari.
La casa del jefe de Estado es una choza de madera, típica de la región, que prácticamente se encuentra deshabitada desde que Morales asumió la presidencia.
"Es un honor visitar el pueblo del presidente (Evo Morales) y su vivienda, tener un contacto con donde se crio y donde se fue formando", remarcó Almagro a los periodistas, que se dieron cita en ese lugar.
El secretario general de la OEA llegó a la casa de Morales luego de una visita al complejo petroquímico de Bulo Bulo y a las áreas de producción alternativa de la provincia Chapare.
"Lo que vi son enormes plantaciones de plátano y las piscinas piscícolas, entonces, verdaderamente la canalización de los proyectos es positiva y eso me parece un enorme paso en la erradicación de cultivos (de coca)", puntualizó Almagro al referirse a un sobrevuelo antes de llegar a la casa de Morales.
Almagro y Morales ingresaron unos breves minutos a la casa, donde el Primer mandatario contó algunas experiencias que vivió en ese lugar, que lo acogió después de vivir con sus padres en el departamento andino de Oruro, en su natal Orinoca.