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  • Diario Digital | miércoles, 24 de abril de 2024
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Anapo denuncia que "sistema perverso de precios" afecta a pequeños productores de soya

Anapo denuncia que "sistema perverso de precios" afecta a pequeños productores de soya

El director de la Asociación de Oleaginosas y Trigo (Anapo), Richard Paz, denunció que en el país existe un sistema perverso para fijar el precio interno de la soya, y esta situación afecta principalmente a los pequeños productores.


"Lo grave y la preocupación del sector productivo asociado a Anapo es la perversidad del sistema de formación de precios a nivel interno en Santa Cruz, no hay transparencia para la formación del precio, y sobre todo los pequeños productores están a merced de la fijación de precios por parte de la agroindustria", aseveró Paz.

Indicó que si bien factores externos fijan el precio internacional de la soya y esto afecta a los productores nacionales, las políticas de fijación del precio interno del país, consideradas eradas, afectan más.

"El principal factor de esto creo que son las políticas todavía erradas que está manteniendo el Gobierno sobre el sector productivo, el principal es la restricción a las exportaciones de la soya, por ejemplo", apuntó a Unitel.

Paz dijo que el sector al tener restringida las exportaciones, el gobierno al prohibirle al productor que pueda tener una opción más de comercializar su grano afuera, "le hace un gordísimo favor a la industria, y todos los productores quedamos como encerrados, y ellos saben que hoy, mañana o pasado vamos a caer en la industria" con las condiciones de precios que ellos impongan.

El Director remarcó que lo que los productores piden desde hace tiempo al Gobierno es que desregule el mercado interno y libere las exportaciones totalmente, y "no haya las bandas de precios y la regulación del mercado interno que es totalmente dañino para el sector productivo y para el sector primario".

Paz indicó que existe el grano de soya suficiente para abastecer el mercado interno y un excedente para exportar, por lo que no es necesario mantener las políticas de regulación.

"El consumo interno del país oscila alrededor del 20 por ciento del grano de soya que se produce en el país, lo demás es exportable, lo demás lo procesa la industria, lo convierte en aceite y harina y lo exporta", apuntó.

Subrayó que el objetivo de la liberación de las exportaciones es transparentar el precio para que la agroindustria vaya a "tener que pagar un poquito más para que la soya no tenga la tendencia a salirse" del país.