Con ese subtítulo, el diagnóstico de la Estrategia de Desarrollo Integral Metropolitano (EDIM) sintetiza la “historia” de la planificación de la parte del territorio más importante de Cochabamba, es decir, lo que actualmente constituye la Región Metropolitana de la ciudad de Cochabamba, denominada Kanata. Empieza identificando el espacio de planificación del área urbana, según el SIGED del INE - Bolivia (Sistema de Información Geográfica Estadístico para el Desarrollo), que como su nombre lo indica, se centra en las áreas urbanas de la región metropolitana. A continuación, identifica otro espacio de planificación, según el Plan de Acción para el Valle Central de Cochabamba, del año 2013, donde se establecen criterios y prioridades contextualizados para ese entonces. Después, se menciona el espacio de planificación a partir de las áreas homologadas, según la Ley 247 (Ley de Regularización del Derecho Propietario sobre Bienes Inmuebles Urbanos destinados a la Vivienda), para regular nuevamente las tendencias del crecimiento urbano, de acuerdo con el criterio de cada municipio. Otro es el Espacio de Planificación de la Cuenca del río Rocha que, si bien responde a un criterio de integralidad del territorio en términos de considerar simultáneamente los ámbitos urbanos y rurales, se extiende más allá de los límites metropolitanos. Y, finalmente, se muestra el espacio de planificación de acuerdo con los proyectos estratégicos que se localizan fuera de la Región Metropolitana, que considera a otros municipios, como Santiváñez y Capinota.

Como se puede apreciar, son seis “áreas de gestión y planificación” que se sobreponen en términos de tiempo y espacio. Además, como afirma el citado documento, son planificaciones institucionales predominantemente “desarticuladas entre sí”. Entonces, esta es una de las razones que explica el “extravío” del desarrollo cochabambino, porque sencillamente estamos, o en el mejor de los casos, hemos estado mucho tiempo sin consensuar un norte para las expectativas futuras del departamento y de la propia región en cuestión. Como dice un viejo adagio “no hay viento favorable para el barco que no sabe a dónde va”. Ahí la importancia, de la propuesta del equipo responsable de la elaboración de la Estrategia de Desarrollo Integral Metropolitano (EDIM), de presentar “una primera propuesta para debatir y profundizar”. De lo contrario, se seguirán proponiendo espacios de planificación de mucha buena voluntad solamente. El guante está echado.