Opinión Bolivia

  • Diario Digital | jueves, 28 de marzo de 2024
  • Actualizado 20:44

COLECTIVO TELARTES

¿Y usted que hace…?

¿Y usted que hace…?
Algunos colegas lo relatan como un chiste u ocurrencia y muchos lo contamos como una realidad. Y es verdad, me pasó. Entré en una oficina —no diré el nombre de la empresa— me tomaban los datos personales y me preguntan, ¿y usted qué hace? Yo les contesto: Soy artista (músico). Y me vuelven a preguntar: No, su profesión… Les vuelvo a contestar: Por eso, soy artista. La señorita, con mirada burlona y cara risueña, me dice: Me refiero a ¿de qué vive? Hundo la mirada en su inocente y patética incredulidad y le digo: Justamente de hacer arte. En eso me dice: Tengo que poner una ocupación en este espacio… Le corto y le digo: Ok, ok póngale que soy periodista y nos dejamos de esto, ¿sí?
¿Y por qué la incredulidad?, dirán ustedes. Pues así era en algunos tiempos y hasta ahora en algunos lugares. El arte no era una profesión o un “modus vivendi”, era simplemente un “hobby” o un pasatiempo. ¿Y qué hacíamos los que “intentábamos” vivir de lo que nos gustaba hacer? Lo mismo que ahora. Mendigar a autoridades, empresas, microempresarios, federaciones, ferias, medios de comunicación, dueños de boliches, dueños de plazuelas y de calles y hasta dueños de tu propio espacio (nuestros padres)

Pero bueno, llegamos a una época increíble en la que ya se habla de economía naranja, de políticas culturales, de industria de las ideas, de colectivos, de asociaciones y “tukuymas”. Pero, qué lindo, hemos avanzado tanto… ¿y quién nos tira pelota? Si no mostramos en las calles lo que producimos nadie se entera de lo que hacemos, y lo más lindo no nos dejan ni las calles porque “está prohibido” dizque… ¿Y de qué comemos?... ¿Y nuestras wawitas?..

Ahora esos colectivos, asociaciones y demás juntes artísticos, estamos dispuestos a mostrar algo que no se esperaba, pero que estábamos ansiosos de tener, y si las autoridades nos lo permiten o por lo menos permiten ejercer nuestro derecho ciudadano, de mostrar a “cochalas” y “cochalos” que habíamos sido pues parte de esta sociedad, lo haremos

Ojalá podamos ejercer nuestra labor mediante esta Ley Municipal de las Culturas y las Artes que estamos impulsando y que tanto nos hace falta —por primera vez en la historia de quichicientos alcaldes, alcaldesas, prefectos y gobernadores— y así poder decir: Oye, soy músico o pintor o actor o bailarín o breakdancer o performing artist o cirquero... ¡Anota!... ¿No ve? Y a propósito, Usted ¿qué hace?