Los artistas plásticos Christian Torrico, Esmeralda Méndez, Gabriela Pimentel y Samuel Maita hacen parte de una muestra colectiva que se caracteriza por la experimentación y empleo de métodos no-tradicionales, en técnicas como el grabado, óleo, acuarela y fibra de vidrio.

La exposición se lleva a cabo en el salón Gíldaro Antezana (plaza 14 de Septiembre esquina España). Puede ser visitada de lunes a domingo de 10:00 a 12:00 horas, y de las 16:00 hasta las 21:00. Permanecerá abierta hasta el 17 de este mes.

La exposición se abre con obras de Christian Torrico, quien es, tal vez, el artista de la muestra que más experimentación realiza. Combina técnicas tan dispares como el óleo y la acuarela en un mismo cuadro, o el grafito y el carbón.

Utiliza soportes poco recomendados para la ejecución de la acuarela, por ejemplo, en lienzo. Además, emplea materiales inusuales en la producción local, como alquitrán y aerosol.

“Trato de utilizar todo lo que se pueda para imprimir o pintar en un soporte bidimensional. No tengo una técnica específica y reúno todos los medios en un solo material. Creo que es una manera de romper con el academicismo más puro y tradicional”, indicó Torrico.

Apuntó que su temática está “alejada de lo tradicional/cultural”, y plasma temáticas sombrías y lúgubres, cargadas de colores oscuros, corriente que llamó “arte oscuro”. Una de las piezas expuestas es la copia de “Pinhha” (ganadora del Premio Único en Grabado, en el último Salón 14 de Septiembre). Es un toro con fondo negro siendo mojado por la lluvia, consiguió el efecto del goteo a través de azúcar, acrilex y agua.

Siguen las obras de Maita, las cuales, en una gran parte, son el resultado de su residencia artística en la Fundación Ace para el Arte Contemporáneo de Buenos Aires. Son grabados con métodos poco comunes como el stencil, sed agua tinta o colorgrafía.

“Me siento cómodo cuando consigo plasmar lo que siento, el medio no es muy importante”, indicó. El contenido está relacionado con temas sociales y espirituales como la concepción de la vida, los estereotipos y la violencia.

Una de las xilografías expuestas es “Metamorfosis”, donde enseña, a través de varias láminas, el proceso de la técnica, desde la matriz original tallada hasta la plancha final.

Las acuarelas de Gabriela Pimentel suponen los productos de la artista durante su formación con pintores en Ecuador, Perú y Serbia, por mencionar algunos. Se trata de figuras humanas, animales y paisajes marinos, entre otros.

Una de las últimas obras es la de un gallo realizado con la técnica de ink painting, aprendida por Pimentel en Serbia con Endre Penovca. La acuarelista explicó que el método como el cuadro representan la parte racional (pincelada seca) y emocional (la que se difumina) en cualquier pintura.

Destacó de la técnica acuosa la independencia que tiene la obra del artista. “No todo depende de ti, sino de la mancha, del agua misma que hace fluir el color”.

La muestra se cierra con esculturas de la orureña Esmeralda Méndez, quien modela figuras humanas en arcilla hasta utilizar la resina que termina en fibra de vidrio.

50 piezas

Aproximadamente se exponen en la exhibición, con cuadros al óleo, acuarela y grabados en diferentes técnicas.