La Cámara de Diputados empezó ayer con el análisis del proyecto de ley del Sistema Universal de Salud (SUS). El presidente de la Cámara, Víctor Borda manifestó a ANF que el Gobierno y el oficialismo han sido "bastante flexibles" con el Colegio Médico. "No hay observaciones de fondo (al proyecto de ley). No cuestionan la naturaleza de la ley, ellos dijeron que no van a oponerse. La observación mayor es al tema financiero y a la sostenibilidad", declaró el legislador.

Por su parte, los médicos presentaron la popuesta "Nuestra Salud por todos y para todos".

El presidente del Colegio Médico de La Paz, Luis Larrea explicó que el Sistema Boliviano de Salud (SBS) estará bajo dirección de un Consejo Nacional de Salud, con autonomía política, cuya gestión se ejercerá en Consejos Departamentales de Salud, mientras que la función operativa estaría confiada a los municipios, según resume ERBOL

Explicó que se optó por los municipios como operadores de sistema, por su cercanía a la población.

El SBS también prevé una separación entre el sector de la salud pública, que sería financiada por el Estado, con la seguridad social sustentada con aportes, la salud privada y la medicina tradicional.

La propuesta plantea cuatro fuentes de financiamiento.

La primera es que se destine a la salud el 10 por ciento de los ingresos por impuestos y Aduana.

La segunda es crear impuestos que desalienten las prácticas insalubres, como el tabaco y bebidas azucaradas.

La tercera es el impuesto a la coca, con lo que se podría recaudar 90 millones de dólares.

La cuarta fuente de financiamiento sería recuperar la disciplina fiscal, con medidas como controlar el gasto en adquisiciones y contener el crecimiento de la burocracia.

La ministra de Salud, Gabriela Montaño, ratificó que el 1 de marzo arrancará el SUS.