Son cuatro proyectos con los que inicia el año 2019 el Navegador

Indígena, dos en el Territorio Indígena de Lomerío junto a la

Nación Monkoxi y dos en el territorio indígena Jacha Marka Tapacari

Condor Apachetas como pequeñas iniciativas piloto nacidas raíz del

monitoreo que identificó los derechos referidos a los recursos

naturales y culturales como los más vulnerados en los Pueblos

Indígenas en el país.

El

Navegador Indígena monitorea la implementación de la Declaración

de las Naciones Unidas (ONU) sobre los Derechos de los Pueblos

Indígenas, los resultados de la Conferencia Mundial sobre los

Pueblos Indígenas y los aspectos esenciales de los Objetivos de

Desarrollo Sostenible (ODS).

El

coordinador del proyecto, Leonardo Tamburini dijo que el Navegador

Indígena ya dió inició con un conjunto de encuestas y de sondeos

sobre la situación en el cumplimiento de los derechos de los pueblos

indígenas para después financiar proyectos en base a los derechos

que están en dificultad.

“En

este caso como vemos tiene que ver fundamentalmente asociado a la

cultura y a los recursos naturales”, explicó el también

investigador del Centro de Estudios Jurídicos e Investigación

Social (CEJIS).

Uno

de los proyectos se realiza en La Asunta para que la comunidad pueda

tener una provisión estable de agua potable en calidad y en cantidad

suficiente. Además, el proyecto busca establecer un sistema y

normativa de protección al recurso del agua para proteger las

cuencas donde ésta se genera.

La

lengua bésiro es la protagonista del segundo proyecto enfocado en la

implementación de la lengua y la currícula regionalizada en las

unidades educativas de dos comunidades: San Simón y Palmira. El

proyecto comprende varios grados incluyendo a niños de cero a cuatro

años de edad en la aplicación de los nidos lingüísticos

supervisados por los ancianos que hablan la Lengua Bésiro.

“Tienen

duración de un año y se espera con eso que sean iniciativas piloto

para que se conviertan en una estrategia de la futura autonomía

indígena en el territorio de Lomerío”, dijo Tamburini, sobre los

dos proyectos ubicados en San Antonio de Lomerio en la Chiquitania

boliviana.

Otros

dos proyectos se encuentran en el Ayllu Jacha Marka Tapacarí –

Condor Apacheta en la provincia Poopo del departamento de Oruro.

Una

de las iniciativas se basa nuevamente en la educación a través de

la capacitación de los docentes y la socialización del uso de

determinadas herramientas en idioma Quechua en las escuelas

primarias, fundamentalmente para niños. La recuperación de la

lengua tendrá un apoyo “a través de una herramienta que es un

periódico que se edita en quechua hace muchos años, de parte de la

institución CENDA, con quién se va a ejecutar el proyecto”,

explicó el investigador.

También

se construyen silos forrajeros para alimentos durante los periodos de

no cosecha.

El

CEJIS es el coordinador nacional del Navegador Indígena que ya se

encuentra generando datos y documentación que se publican en una

plataforma virtual de acceso público.

El

Navegador Indígena es una iniciativa de colaboración desarrollada y

administrada por un consorcio global compuesto por la OIT, IWGIA,

Teb- tebba, AIPP, Forest Peoples Programme y el Instituto Danés de

Derechos Humanos, con el apoyo de la Unión Europea (UE). Buscan ser

una plataforma interactiva en su trabajo y le permite a los mismo

indígenas generar su propia información basada en las propias

necesidades.

La

plataforma virtual recoge la información en las comunidades, junto a

autoridades indígenas y comunarios. En los encuentros, quienes

trabajan en las encuestas tienen la oportunidad de comentar sus

experiencias en el trabajo de recolección de datos en el territorio

indígena.