Opinión Bolivia

  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
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Cochabamba tiene que reaccionar

Cochabamba tiene que reaccionar
Hasta hace unos 10 años, cuando se hablaba sobre economía y desarrollo humano, Cochabamba se encontraba siempre entre los tres primeros lugares, alternando con La Paz y Santa Cruz, que era un indicador que mostraba el potencial de la Llajta en el contexto nacional

Sin embargo, en las últimas gestiones, Cochabamba no apareció más en los tres primeros lugares, cayendo estrepitosamente hasta el sexto lugar, situación que muestra un anquilosamiento de la economía regional, mientras que otras ciudades siguen desarrollando sus potenciales

Un último informe, hecho público por la Federación de Entidades Empresariales Privadas de Cochabamba (FEPC), ratifica que la Llajta no ha podido recuperar su sitial de importancia en el plano económico

La región se sitúa como sexta en la participación del Producto Interno Bruto (PIB) per cápita, de acuerdo con el informe “Cochabamba, Realidad Numérica”, de la FEPC, a junio de 2018

El departamento tiene un PIB de 2.879 dólares per cápita, mientras que el promedio nacional es de 3.390

El presidente de la FEPC, Javier Bellott, afirmó que las bases productivas de Cochabamba están demasiado reducidas y, “obviamente hay que revertir esos indicadores”

Bellott puntualizó que en el departamento hubo una baja sustancial en las áreas de manufactura e hidrocarburos, esta última debido a la disminución de la producción

Otro indicador que confirma el mal momento que vive Cochabamba en materia económica es el sexto lugar que ocupa en exportaciones

Según datos de la Cámara de Exportadores de Cochabamba, la Llajta exportó entre enero y octubre de 2018 404.932.773 dólares, que la ubica en sexto lugar con una participación del 5 por ciento del total. Santa Cruz se encuentra en primera posición, con un 27 por ciento del total. En ese mismo periodo de tiempo recibió ingresos por 2.168.690.802 dólares

Estas cifras, que se repiten en forma recurrente en los últimos años, deberían ser motivo de preocupación para las autoridades y empresarios, porque es un síntoma de que estamos por mal camino y que si no reaccionamos, el porvenir se torna poco auspicioso para los aproximadamente dos millones de personas que viven en Cochabamba

Primero, habrá que hacer un diagnóstico riguroso sobre los motivos por los que Cochabamba ha pasado de estar casi siempre entre los tres primeros lugares a la sexta posición de los nueve departamentos de Bolivia

Y una vez que se tenga el diagnóstico documentado, se tendrán que generar estrategias a corto, mediano y largo plazo, planes y proyectos que deben ser elaborados por las instituciones y organizaciones más representativas, pero que participen con criterios técnicos, despejándose de cualquier militancia política, especialmente los que tienen el afán de hacer quedar mal al oponente que lleva otro color de camiseta

Una vez que se haya diseñado una estrategia de desarrollo, las autoridades municipales y departamentales, con la participación de los empresarios y otras organizaciones deberán ser las encargadas de implementarlas, pero con objetivos bien definidos

Lo más preocupante es que el desarrollo humano, que se refiere a la educación, salud y la implementación de servicios básicos como el agua y el alcantarillado también han caído a lugares poco honrosos

Otrora, Cochabamba se jactaba, en el buen sentido de la palabra, de ser uno de los departamentos más avanzados de Bolivia, situación que no ocurre hoy en día, toda vez que estamos relegados a un sexto lugar y con la tendencia a seguir en esta caída libre

Si no nos sacudimos y reaccionamos a tiempo, que no nos extrañe que en pocos años estemos ocupando las últimas posiciones de la tabla.