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  • Diario Digital | jueves, 25 de abril de 2024
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No hable ni chatee con extraños

Anzuelo. Trabajar como dama de compañía es la antesala para la prostitución, según testimonios que se conocieron en la prensa. Los proxenetas usan perfiles falsos en las redes sociales para captar a sus víctimas.<BR>
No hable ni chatee con extraños
Para un criminal es relativamente fácil crear un perfil falso en las redes sociales y, con argumentos convincentes, captar a jóvenes mujeres con la promesa de un trabajo bien remunerado. En el corto plazo, la ilusión de ganar dinero se convierte en una pesadilla. En las últimas semanas se conocieron varios casos de trata y tráfico de personas.

El martes 15 de enero, la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen de Cochabamba informó que atendió un nuevo caso de trata y tráfico de personas con fines de explotación sexual y aprehendió a dos hombres que utilizaban perfiles falsos en las redes sociales para captar a jovencitas a las que pretendían hacer trabajar como damas de compañía.

Trabajar como dama de compañía es la antesala para la prostitución, según varios testimonios que se conocieron por los medios de comunicación.

Jóvenes mujeres que necesitan un trabajo o aquellas que provienen de hogares desintegrados son las más vulnerables de caer en las redes de trata y tráfico, lideradas por proxenetas que saben cómo abordar a sus víctimas.

Lo primero que se debe recomendar a las jóvenes que reciben propuestas de trabajo mediante las redes sociales es tener el máximo cuidado y desconfiar, más aún si se trata de personas desconocidas o empresas que no son muy conocidas en el medio.

Asimismo, si hay necesidad de acudir a un lugar para una cita es mejor ir acompañado de alguien, mejor si va más de una persona, porque eso podría evitar incluso hasta un secuestro.

Los proxenetas aprovechan la necesidad de una persona para convencerla de aceptar un trabajo, a quien le aseguran que solo se dedicará a acompañar a los clientes, tarea por la que recibirá una muy buena remuneración.

Sin embargo, la intención de estos delincuentes es que las jóvenes que caen en sus redes sean explotadas en la prostitución, contra su voluntad y en muchos casos con amenazas de muerte de por medio.

En el último caso, la Policía informó que los dos hombres proxenetas habían logrado contactar a 25 mujeres, que incluso podrían ser más. Muchas de ellas no denunciarán por vergüenza y temor a represalias.

A mediados de agosto de 2018, en la ciudad de La Paz, la Policía capturó a un pedófilo que también se valía de un perfil falso en las redes sociales para seducir a sus víctimas y que estas le envíen fotografías con un "tinte sexual", para después extorsionarlas.

En ese caso se estableció que este delincuente estaba implicado en pornografía infantil, por lo que a través de las redes sociales se contactaba con adolescentes de 14 años o de menor edad.

Para evitar que los niños, adolescentes y jóvenes sean víctimas de trata y tráfico, los padres tienen una gran responsabilidad, deben orientar a sus hijos para que tengan sumo cuidado cuando navegan por las redes sociales y, en lo posible, no hacer caso a los extraños que les envían solicitudes de amistad, y menos cuando les hacen propuestas de trabajo dudosas.

Si la adolescente o joven tiene dudas, debe inmediatamente advertir a sus padres para que juntos puedan resolver el problema o, en su caso, llamar a la Policía, a los especialistas que investigan delitos cibernéticos. Con esta acción se podría evitar que estos proxenetas ataquen a otras jóvenes.

A los adolescentes recomendarles que deben confiar más en sus padres o tutores, sin que eso signifique que ellos se inmiscuyan totalmente en sus vidas.

Un columnista de este diario recomendaba que los consejos de nuestros abuelos, de no hablar con extraños ni aceptar amistades ni regalos se debe también aplicar a las redes sociales, porque no sabemos quién se oculta detrás de un supuesto nombre.

Por último, la justicia debe ser dura cuando se trata de castigar a estos delincuentes proxenetas.