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  • Diario Digital | sábado, 20 de abril de 2024
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El policía albañil Abraham logró top 10 y... ¡ahora hace de garzón!

Su vida es aprendizaje continuo. El uniformado, que cumplió 24 años en octubre, consiguió lo que tanto anhelaba en la 10K, tras una lucha encarnizada. Invirtió 550 bolivianos en zapatilla y recuperó el dinero con el premio.
El policía albañil Abraham logró top 10 y... ¡ahora hace de garzón!





Abraham Carballo, el policía de 24 años que además de servir a la patria también trabaja como albañil y guardia de seguridad para “bancarse” su carrera paralela de atleta, volvió a sorprender: ahora comenzó a aprender las labores de garzón. Sí. El uniformado, que hace de la risa no forzada su mejor defensa ante las adversidades cotidianas (más aún cuando el contexto es limitado económicamente), brindó su tiempo y sus atenciones en un matrimonio realizado recientemente en la Llajta.

Ante la propuesta de un camarada sobre desempeñarse en el servicio de mozo, el nacido en el Trópico respondió sin titubeos: “Claro. Cuenta conmigo. No te voy a fallar. Hay que ser curioso y aprender de todo en esta vida”.

Y la buena predisposición le valió ganar 150 bolivianos por algo más de ocho horas de trabajo. Nada mal para el policía, tomando en cuenta que cuando rinde como guardia de seguridad le pagan 70 bolivianos por noche. “Si me llaman, voy como estoy, nomás. A veces hago de garzón. Este útimo hemos ido a una boda. Un camarada de mi unidad me llevó. Me fijo bien para que ya la siguiente (ocasión) pueda quitarle el mando, ja ja. Uno va aprendiendo de esa forma”.

Si de sumar conocimientos se trata, Abraham no discrimina nada, sobre todo porque ello le significará luego un ingreso extra e independientemente a su salario como policía. Y destina lo ganado en su carrera ascendente como atleta de fondo. Las buenas sensaciones que le dejó el octavo puesto conseguido en una carrera pedestre, en Colombia, le dieron más ganas para fortalecer su lado deportivo.

El dato poco afortunado está, lamentablemente, a la mano: el de la institucion verde olivo todavía no cuenta con patrocinio.

Bien clara fue su petición cuando en noviembre de 2018 el muchacho solicitó, mediante EL LÍDER, que lo ayuden con “lo que sea”.

Cualquier colaboración suma para quien ahorra cada peso para cumplir con un programa alimenticio medianamente razonable y el pago de una deuda contraída con un banco (se prestó dinero para estudiar y abona por mes).

Es por ello que el joven policía recalcó su petición en esta nota. “Sería lindo que alguien me costee, tal vez, un pasaje. Que sea su cariño. Me ayudaría mucho. Lo esencial es mi alimentación y los tenis”.

RECUPERÓ LO INVERTIDO Hace unas semanas, Abraham alcanzó lo que tanto anhelaba: acceder al top 10 en una 10K Presiente Evo. Lo hizo en el Trópico, su casa, donde peleó, codo a codo, con dos contrincantes más en la recta final. Solo faltaba medio kilómetro y fue allí que el policía “apretó” el acelerador para no dejar escapar el objetivo.

Ya en 2015, en la edición beniana, había estado a punto de lograrlo. La ilusión se le fue de las manos solo por una casilla (acabó 11).

Para correr mejor vio que era necesario comprar unas zapatillas adecuadas para el escenario. De su sueldo mensual apartó 550 bolivianos, monto que luego invirtió en la adquisición de unos calzados de una marca deportiva muy conocida.

La compra golpeó su bolsillo. Fue por ello que el atleta se puso más firme en el cometido de meterse en el top 10 de la contienda desarrollada entre Chimoré y Shinahota. El sacrificio no podría, de ninguna manera, no tener un buen resultado.

“De mi sueldo compré. He dicho: sí o sí debo entrar décimo. Tengo que rescatar lo que invertí. He luchado y recibí 700 bolivianos. Para mí fue de mucha ayuda. Hago todo esto por amor al deporte”.

El policía, que en 2012 y 2013 participó en los Juegos Plurinacionales Presidente Evo (en 2014 ya había cumplido 19), teme que, en un futuro no muy lejano, las pruebas pedestres ya no se efectúen en todo el país. De todos modos celebra contar con una profesión que le permite gozar de un sueldo.

“Si el Presidente (Evo Morales) se va, no creo que haya 10K ya. Esta es la carrera más grande de Bolivia. Los élite están preocupados. Yo no, porque tengo una profesión y voy a vivir con esito”.