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  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
  • Actualizado 11:18

Francia barrió con todos en Rusia y logró bicampeonato

El representativo galo terminó el certamen como invicto y ganó sin dificultad a Croacia que dio lucha, pero la velocidad del Bleu fue determinante. 
Francia barrió con todos en Rusia y logró bicampeonato





La selección de Francia impuso su ritmo en el mundial de Rusia y conquistó su segundo título mundial luego de 20 años, con Kylian Mbappé inspirado, pese a su corta edad.

Una Francia letal en ataque dejó en la lona a Croacia (4-2) y rompió todos los pronósticos de los astros Neymar (Brasil), Lionel Messi (Argentina) y Cristiano Ronaldo (Portugal), entre otros.

El conjunto de Didier Deschamps, con una de las generaciones más talentosas de su historia, fue demasiado para una Croacia valiente, pero no supo contener el potencial ofensivo de les bleus.

En su tercera final mundialista (1998 y 2006) el combinado francés demostró aplomo a la hora de contener a una Croacia que demostró esfuerzo y entrega comandados por Luka Modric, quien destacó por su buen fútbol.

Su voluntad de tener el balón unido a su buen trato con el mismo, le permitió tener arrinconada a Francia. Modric y Iván Rakitic obligaban a la defensa francesa a excederse en la marca desde el primer instante.

Desde que comenzó el certamen los franceses expusieron sus condiciones en el terreno de juego superando a Australia (2-1), Perú (1-0) e igualaron con Dinamarca (0-0), en la fase de grupos.

Ya en los octavos de final el Galo se enfrentó a la Argentina de Lionel Messi y lo dejó al margen del campeonato (4-3).

El equipo que dirigió Didier Deschamps tuvo en los cuartos de final a otro sudamericano como Uruguay a la que superó (2-0), dejando al margen al cuadro de Óscar Washintong Tabárez y de los astros Luis Suárez y Edinson Cavani.

En las semifinales, Francia tuvo complicaciones para vencer a una dura Bélgica que incluso estuvo cerca de superar a los Galos.

Con el pasar de los partidos, Francia se convirtió (puede que obligada por las circunstancias) en un equipo contragolpeador que empezó a recurrir a los balones largos a Mbappé, quien terminaba concretando, en la mayoría de las acciones ofensivas.

Pese a que Croacia anotó dos goles, Francia nunca renunció al ataque y presionaron a los ajedrezados para desgastarlos físicamente y quedarse con el máximo cetro.

La fiesta en territorio francés fue mayor a la que conquistó como local en 1998, cuando ganaron su primera estrella mundial.