Severina Soto Camake, nació en Toro Toro (norte Potosí), el 8 de noviembre de 1952. El Ministerio de Educación le entregó ayer un certificado de competencias como recolectora de material aprovechable. Antes superó una prueba de conocimientos.

La moderadora del evento la nombró. Con una sonrisa se aproximó hacia la testera y el viceministro de Educación Alternativa y Especial, Noel Aguirre, le entregó el documento. Ella vestía una pollera de tono oscuro, una blusa blanca y una chompa color durazno. Tenía el cabello recogido en dos trenzas delgadas que eran unidas por un lazo en la espalda. La mujer de 66 años fue la primera de 143 personas que recibieron el título.

Severina, más conocida como “doña Seve” contó a OPINIÓN que se dedica a la recolección hace 26 años. “Jovencita me vine a Cochabamba. Antes trabajaba en limpieza con el Plan Nacional de Empleos”.

En su niñez se ocupó de los quehaceres domésticos y la crianza de animales. No se formó en la escuela y por eso considera un gran logro la certificación. Es “experta” en: recolectar material aprovechable aplicando técnicas de clasificación y tipificación de residuos, agrupa en tipos y subtipos para optimizar la cadena productiva del reciclaje y acondiciona lo custodiado para su comercialización directa e indirecta, según detalla el documento.

Severina comentó que tiene tres hijos, pero vive solo con la menor, en una habitación alquilada por el kilómetro 10.5 a Sacaba. “El cuarto me cuesta 300 bolivianos cada mes. Las dos (madre e hija) dormimos en un solo lugar (...). Cada vez tenemos que ir de un lado a otro. No tengo una casa ni un lotecito”.

Indicó que el oficio de recolectora no es nada fácil puesto que se exponen a riesgos. Se encuentran con indigentes e inhaladores de clefa que las intimidan con amenazas e insultos. En la clasificación de materiales sufren accidentes debido a que encuentran vidrios rotos entre la basura. “Ahora nos cuidamos. Usamos guantes, barbijo y botas”.

Comentó que en los contenedores no solo hallan botellas plásticas, cartones, hojas u otro material para reciclar, sino también restos de comida, heces e incluso animales muertos.

DOS GRUPOS Se validó dos ocupaciones. 70 personas recibieron la certificación como: recolector del material aprovechable. En este grupo trabajan quienes son “independientes”.

También 73 trabajadores de la Empresa Municipal de Servicios de Aseo (EMSA) fueron reconocidos como: recolector de residuos sólidos en zonas urbanas. Ellos realizan la limpieza y barrido de áreas verdes, vías, torrenteras, plazas y mercados aplicando técnicas de barrido y amontonado de residuos. Asimismo, recogen residuos sólidos provenientes del barrido, puntos de acopio y no autorizados para su traslado y disposición final. Luego, clasifican residuos de origen domiciliario para dejar en centros de recepción de materiales aprovechables, relleno sanitario o botadero.

CAPACITACIÓN La directora de la Fundación Swisscontact, Carola Ortuño, indicó que los recolectores fueron capacitados a través del proyecto “Ecovecindarios”.

Explicó que se realizó la solicitud al Ministerio de Educación para certificar el oficio. La institución evalúo e hizo un mapeo en varios talleres. Se elaboró el exámen y los interesados dieron la prueba.

El viceministro de Educación Alternativa y Especial, Noel Aguirre, destacó la formación del sector. “Ahora podrán mostrar con orgullo el certificado que valida su oficio”.

Comentó que en 10 años, 163 mil personas recibieron el certificado de competencias, en el país. “Hay 160 ocupaciones como agricultor, mecánico, payaso y otros oficios”.

El Sistema Plurinacional de Certificación de Competencias (SPCC) se creó a través del Decreto Supremo No. 29876 del 24 de diciembre, de 2008.

El documento está firmado por el Ministro de Educación y el Viceministro de Educación Alternativa y Especial.

143

Beneficiados

El Ministerio de Educación entregó 143 certificados de competencia. Un grupo recibió como recolector de material aprovechable. El otro como recolector de residuos sólidos en zonas urbanas. Es el segundo año que gradúan.