La prensa británica dice que Karen White (52) se deprimió al tratar de adaptarse a su nuevo hogar. La reclusa, que había sido enviada a una cárcel de mujeres tras alegar su condición trans, fue acusada de abusar de cuatro mujeres que cumplían su condena en el mismo lugar, lo que obligó a las autoridades penitenciarias a reubicar a quien en el pasado se hacía llamar Stephen Wood, y ampliar por más años su castigo carcelario.
El día de ayer, medios locales señalaron que White se encuentra ahora en la cárcel para hombres de alta seguridad Wakefield, apodada como "Monster Mansion" (´La mansión de los monstruos´), debido a la gran cantidad de asesinos y peligrosos criminales que alberga.
El año pasado, mientras cumplía condena por violencia, "ataque indecente" y "grave indecencia que involucra niños" -informó Express-, Stephen Wood comunicó que se identificaba con el género femenino.
Tras pasar a llamarse Karen White, comenzó a vestirse como mujer, a usar pelucas e inició el proceso para una reasignación de sexo. Fue en este contexto que se trasladó a la cárcel de mujeres, donde ocurrieron los ataques.
Tras admitir su culpabilidad frente a una corte, White fue catalogada como un peligro para mujeres y niños y se le informó que deberán pasar nueve años para tener la opción de solicitar la libertad condicional. Según la prensa británica, a White se le permite seguir usando ropa femenina y peluca en Wakefield.

Fuente: Emol.com