En Chile hay duelo de tres días por la muerte de Lucho Gatica, en México, a los 90 años, el martes. El artista revolucionó el bolero y se convirtió en leyenda.

Sus compatriotas recuerdan con fresca nostalgia y cierta distancia al “rey del bolero”, pero los vecinos de su ciudad natal, Rancagua, lo sienten más cerca que nunca, como lo demuestran las visitas que recibió la estatua que le honra. En la mañana se realizó una “misa masiva” para recordarlo y en la tarde, un encuentro musical con artistas locales frente a la estatua.

“De esta forma creo que testimoniamos el afecto, el cariño y el reconocimiento de una ciudad que no va a olvidar nunca a quien fuera de sus hijos más destacados”, dijo el alcalde de la ciudad Eduardo Soto.

Éste homenaje es uno de los muchos que le hicieron tras su partida. Desde la Academia Latina de Grabación lo recordaron como quien cambió “La forma en que se interpretó y construyó un bolero”.

“Con más de 70 años de carrera musical, Gatica tocó las vidas de innumerables audiencias alrededor del mundo con su música líricamente intensa y emocionalmente cautivadora”, dijo ayer en un comunicado el presidente de la Academia Latina de la Grabación, Gabriel Abaroa Jr.

Gatica tiene más de 800 canciones grabadas, entre ellas sus himnos “Historia de un amor”, “Tú me acostumbraste” y “Contigo en la distancia”. El punto culminante de su carrera fue en el año 2008, cuando se le otorgó una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood (EEUU).