Opinión Bolivia

  • Diario Digital | miércoles, 24 de abril de 2024
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Los tesoros del Titicaca, una veta para el turismo

Los tesoros del Titicaca, una veta para el turismo

SANTIAGO DE OJJE

Las ruinas arqueológicas subacuáticas halladas en el lago Titicaca, compartido por Bolivia y Perú, son una veta que las autoridades bolivianas quieren empezar a explotar en ese manto acuífero, que ya es uno de los principales atractivos turísticos del país.

El Titicaca es el lago navegable más alto del mundo, a unos 3.800 metros de altitud en un total de más de 8.500 kilómetros cuadrados, y sirve de frontera natural entre Bolivia y Perú.

Paisajes impresionantes en los que el azul del cielo se funde con las aguas, gastronomía, pesca y turismo religioso son parte de la actual oferta que atrae a visitantes locales y extranjeros a las comunidades bolivianas asentadas a orillas del lago.

A esta oferta se espera sumar un proyecto "visionario", en palabras de la ministra boliviana de Culturas y Turismo, Wilma Alanoca, que es el primer museo subacuático para mostrar las estructuras tiahuanacotas e incaicas halladas en el Titicaca.

"Es un proyecto muy ambicioso, innovador, pero fundamentalmente recupera la memoria histórica, los conocimientos ancestrales de toda la región lacustre aquí en el altiplano", destacó Alanoca.

Todo comenzó hace una década, cuando el investigador Christophe Delaere, de la Universidad Libre de Bruselas, realizó inmersiones en el lago y detectó varios sitios arqueológicos sumergidos, explicó a EFE el jefe de la Unidad de Arqueología del Ministerio de Culturas y Turismo, José Luis Paz.