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  • Diario Digital | martes, 23 de abril de 2024
  • Actualizado 23:15

Invierta bien su Juancito Pinto

Buen uso. Una buena opción es que el padre abra una cuenta de ahorro para su hijo y los 200 bolivianos podrían ser un buen puntapié inicial. Se debe utilizar bien estos recursos económicos y no malgastarlos.<BR>
Invierta bien su Juancito Pinto
Un poco más de 2.2 millones de estudiantes de unidades educativas fiscales, de convenio y centros de educación especial de todo el país empezarán a cobrar desde hoy el bono Juancito Pinto, 200 bolivianos que les permitirá comprar material escolar o alguna prenda de vestir.

Pero también hay casos en los que los padres disponen de este dinero para fines que no benefician precisamente a los estudiantes que asisten regularmente a clases durante el año escolar.

En el caso de Cochabamba, el bono escolar llegará a cerca de 436.000 estudiantes, según informó el director departamental de Educación, Iván Villa.

Los estudiantes, desde primero de primaria a sexto de secundaria, esperan esta fecha con bastante ilusión, porque saben que recibirán un dinero que les permitirá comprar lo que necesitan.

El ministro de Educación, Roberto Aguilar, informó en pasados días que para el pago de este bono se dispondrán de 444 millones de bolivianos, que son aportes de las empresas estatales, según el periódico La Razón.

Para el pago de este beneficio, el Ministerio de Defensa desplazará 5.157 militares de las tres fuerzas que llegarán a 14.800 unidades educativas.

Como sucede en los últimos años, cientos de padres y madres, junto con sus hijos, llegan hasta el Servicio General de Identificación Personal (SEGIP) de los diferentes departamentos para conseguir la cédula de identidad, abarrotando esta entidad.

No obstante, el ministro Aguilar aclaró que no es “imprescindible la presentación” de la cédula de identidad para el cobro del bono, por lo que recomendó a los padres tramitar este documento otro día, y no necesariamente en esta temporada.

Este beneficio llegará también a unos 23.000 estudiantes con discapacidad, en todo el país, informó el Viceministerio de Educación Especial.

Este bono de 200 bolivianos representa para muchos estudiantes un gran apoyo, porque con este dinero pueden comprar material escolar para la siguiente gestión.

Un objetivo, al iniciar el pago de este bono, en 2006, fue incentivar la permanencia escolar, es decir, bajar los índices de deserción escolar, meta que, según el Gobierno se ha logrado.

Datos del Ministerio de Educación dan cuenta de que la deserción escolar en primaria se redujo con este pago, de 6.5 por ciento a 1.8 por ciento desde 2005 a 2018; y en secundaria, de 8.5 por ciento a 4 por ciento , en colegios fiscales y de convenio.

En los últimos años, estudiantes de colegios particulares han pedido que el Gobierno les pague también a ellos el bono Juancito Pinto, porque consideran que se merecen este beneficio que les puede ayudar en la compra de algunos materiales.

Los estudiantes que asisten a unidades educativas privadas argumentan que no todos provienen de familias que tienen buenos ingresos económicos, sino que en muchos casos sus padres hacen grandes sacrificios para cancelar las pensiones, recortando otros gastos.

Estos niños y adolescentes no dejan de tener razón, pero la última palabra la tienen los gobernantes de turno, quienes tendrán que realizar un análisis pormenorizado y decidir en función de los resultados que obtengan.

El país invertirá este año más de 444 millones de bolivianos para el pago de este beneficio, sin tomar en cuenta los gastos por la logística, por lo que los padres, que son los que administran este dinero, deben meditar bien para disponerlo y no, unilateralmente, gastarlo en cosas que no benefician a sus hijos. Se han conocido casos de malos progenitores que incluso utilizaron estos recursos económicos para comprar alcohol, apostar o realizar otro menester sin importancia.

Una buena opción es que el padre abra una cuenta de ahorro para su hijo y los 200 bolivianos podrían ser un buen puntapié inicial.