Opinión Bolivia

  • Diario Digital | martes, 23 de abril de 2024
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SENTIDO COMÚN

Asuntos pendientes

Asuntos pendientes
Han pasado tres años desde que dejé de ser concejala del Gobierno Autónomo Municipal de Cochabamba y aún suenan en mi mente temas en los que trabajé con esmero y que quedaron en los anaqueles, por falta de voluntad política o por falta de tiempo. Creo necesario insistir en su ejecución, por un deber de ciudadana y por el cariño y compromiso de mejorar la calidad de vida y el deterioro ambiental de nuestra ciudad.

El punto de partida de las políticas municipales debiera ser la elaboración de la Carta Orgánica. Cuán importante es tener una mirada estratégica con un horizonte de 30 o 50 años. Es necesario redefinir nuestra autonomía contando con los aportes y sueños de todos y todas. La elaboración de la Carta Orgánica deberá ser un espacio de encuentro, un espacio donde se pueda priorizar el bien común, antes que intereses corporativos que hacen que nos enfrentemos permanentemente en las calles.

Un segundo tema de resolución urgente es contar con un plan de movilidad urbana, que reordene el sistema de transporte y se implemente el tan ansiado transporte masivo, que no solo evitará los terribles congestionamientos, sino que aportará a la limpieza de nuestro aire tan contaminado. No es posible que sigamos mirando pasivos que surjan y se intensifiquen enfermedades respiratorias y gastrointestinales por las partículas elevadas en el aire que sobrepasan los índices aceptables. Este plan debe también retomar el uso de la bicicleta como medio de transporte e incentivar las caminatas, que indudablemente también repercutirá en mejorar la salud de nuestra población. Trabajar por un aire limpio debe ser la emergencia, y tenemos proyectos. Hay en el Ejecutivo municipal un proyecto denominado Emaire (Empresa Municipal de Aire Limpio) orientado a controlar las emisiones de gases contaminantes de movilidades que circulan en nuestra urbe, y que son los principales contaminadores.

En esta misma línea se debe aplicar drásticamente la Ley del Arbolado Urbano con sanciones drásticas a aquellos que eliminan árboles que son nuestros principales aliados en esta lucha por un aire limpio. Por otro lado, rescatamos para nuestra comuna un predio de 32.000 metros cuadrados, Ex Matra, donde se debiera implementar un bosque urbano que es lo que falta a la ciudad.

Otros temas de importancia y que tienen propuestas avanzadas son: la Ley de preservación de la laguna de Quenamari, que actualmente tiene intentos de loteamiento. La Ley del Banco de Tierras que es un primer intento de luchar contra la mercantilización de la tierra. De la misma forma es apremiante la aplicación de la Ley del Patrimonio, para evitar que nuestras construcciones antiguas de valor patrimonial sean arrasadas por el interés económico y de modernidad, destruyendo nuestra historia y nuestra identidad. También es imperiosa la implementación de la Ley de Economía del Cuidado que significa un avance dentro del enfoque de despatriarcalización de las políticas, en el que se prioriza el cuidado y la reproducción de la vida, antes que las obras de cemento para los carros.

Las y los dirigentes vecinales deben ejercer su ciudadanía de manera constructiva, con críticas y con propuestas, dejando de lado intereses corporativos y posiciones políticas que nada bien le hacen a nuestra existencia.

Frente al desgaste de la actual gestión municipal, es necesario que demuestre que trabaja por mejorar la ciudad y por el bienestar de la población y que el dinero de nuestros impuestos se utilice de forma racional y honrada.