Según un estudio realizado por investigadores del MIT, el interior de la Tierra podría ocultar más de un trillón de toneladas de diamantes.
Se encuentran a más de 160 kilómetros por debajo de la superficie, una profundidad mucho mayor que la alcanzada por cualquier expedición de perforación.
Estos diamantes están dispersos entre las “raíces cratónicas”, secciones de roca más antiguas y rígidas del planeta que se encuentran bajo el centro de la mayoría de las placas tectónicas continentales.
Entre un 1 y un 2 por ciento de los cratones podrían estar hechos de diamante puro, un total de casi un trillón de toneladas de diamantes. Se forman en las profundidades de la Tierra, en ambientes de alta temperatura y alta presión.
Solo lo hacen cerca de la superficie a través de erupciones volcánicas masivas.