Cinco millones de personas han visitado el mausoleo que guarda los restos del guerrillero cubano argentino Ernesto Che Guevara desde su inauguración en la ciudad de Santa Clara (centro de Cuba) en 1988, informarón ayer medios oficiales de la isla para Efe.

Del total de visitantes, más de 3,2 millones son extranjeros, un número que comenzó a crecer tras la llegada en 1997 de los osarios del Che y sus compañeros de lucha en la guerrilla de Bolivia, explicaron especialistas del sitio.

La mayoría de los turistas foráneos que llegan al complejo escultórico de Santa Clara -llamada también "la ciudad del Che"- provienen de Alemania, Francia, Argentina, Italia, Canadá, España y Estados Unidos.

Enisyán Romero, un trabajador de la Contraloría de la vecina provincia de Cienfuegos (centro-sur) y el visitante cinco millones del mausoleo, subrayó "la profunda admiración" que siente por el Che, a quien ha rendido tributo en "varias ocasiones" frente a su tumba, publicó el diario estatal Juventud Rebelde en portada.

El complejo santaclareño incluye un museo, la cámara funeraria donde se encuentra el nicho con los restos, un cementerio donde reposan los combatientes del Frente de Las Villas, compañeros de armas del Ché

contra el régimen del dictador cubano Fulgencio Batista, y una gran escultura de bronce que lo representa vestido de campaña.

Entre las piezas más atractivas del museo están el uniforme verde oliva del cubano argentino, su boina y una de sus pistolas.

El mausoleo fue inaugurado en 1988 por iniciativa de Fidel Castro, fallecido en noviembre de 2016 a los 90 años y cuyas cenizas reposaron una noche en el lugar, durante un alto en la caravana que llevó los restos mortales del expresidente desde La Habana hasta la ciudad de Santiago de Cuba, donde fue enterrado.

En octubre de 2017 la isla conmemoró por todo lo alto los 50 años de la muerte de Guevara, asesinado en 1967 en La Higuera (Bolivia) junto a los soldados de la guerrilla que comandaba.

Sus restos fueron trasladados al país caribeño 30 años después y en octubre de 1997 depositados en el mausoleo de Santa Clara.

Para la fecha el Gobierno cubano completó una restauración capital en el complejo escultórico, que incluyó la limpieza y mantenimiento de la estatua, su base, la tribuna, la escalera que conduce al Memorial y los mármoles de los nichos.